El proyecto ICINN de la Asociación de Investigación de la Industria Agroalimentaria (AINIA) investiga la aplicación de nuevas metodologías para testar las emociones del consumidor ante los nuevos productos. Basadas en técnicas sensoriales más rápidas, flexibles y orientadas al consumidor, estos nuevos métodos aportan información de valor a las empresas en el desarrollo de productos que se ajusten a las necesidades reales del mercado.
Así, el objetivo del proyecto es posicionar al consumidor en el centro de la innovación desde las fases tempranas del proceso, para dotar a las empresas de herramientas que les sirvan de ayuda en su actividad de I+D+i. Según Mª José Sánchez, directora técnica de Consumolab, centro AINIA, “el consumidor se mueve cada vez en mayor medida por las emociones, y este componente más irracional tiene un papel muy importante en la decisión de compra. En este sentido, para una investigación de valor, el enfoque metodológico en la innovación de nuevos productos debe ser más holístico, considerando una visión más global del comportamiento del consumidor”.
Además, las nuevas metodologías aportan a las empresas un ahorro importante de costes y tiempo en el diseño de productos, ya que al trabajar con técnicas más cercanas al consumidor final, se reducen los tiempos en el lanzamiento de nuevos productos al mercado. Para Mª José Sánchez, los resultados obtenidos en el marco de este proyecto “suponen un valor diferencial para las empresas, puesto que el modelo combina las evaluaciones hedónicas clásicas del test de producto, con la medida de las emociones del consumidor, que son determinantes en la decisión de compra.”
Innovación dirigida por el consumidor
Las metodologías de co-creación, desarrolladas teniendo en cuenta las necesidades de empresas de alimentación y bebidas, cosmética y cuidado e higiene del hogar, son técnicas no invasivas que además de facilitar el conocimiento del consumidor, destacan por su versatilidad y su facilidad de aplicación. Así, permiten observar al consumidor ante un nuevo producto, un producto ya existente o en su entorno real; sin que sus actitudes puedan ser modificadas por condicionantes externos.
Entre otras metodologías, se ha trabajado con la técnica Check All That Apply (o preguntas CATA) en la que se les facilita a los consumidores un listado de atributos para que marquen aquellos que, en su opinión, están relacionados con cualidades sensoriales o emociones que les evoca el producto que están probando. Con esta metodología se obtiene información descriptiva y espontánea acerca de las características sensoriales y no sensoriales del producto sobre aspectos relacionados por ejemplo, con la marca y la calidad.
Otro método investigado ha sido el Napping. El consumidor dispone de un mapa de dos dimensiones en el que sitúa los diferentes productos que está evaluando. Esta técnica permite la obtención de un mapa sensorial global, capaz de resaltar las diferencias y similitudes existentes entre los distintos productos testados.
Resulta de gran utilidad en la toma de decisiones en los procesos de innovación, por ejemplo a la hora de seleccionar prototipos. Esta técnica supone una alternativa a los métodos descriptivos convencionales en cuanto a rapidez y recursos, ya que no requiere el entrenamiento de los participantes.