¿Eres de los que pasará solo el día de San Valentín? Quizás sea una mala noticia para el corazón, pero no tanto para el bolsillo. Lo cierto es que esta celebración suele traer aparejado un gasto extra para la mayoría de las parejas y convertirse en un enemigo más para el ahorro.
El especialista en finanzas, Guillermo Seañez, director comercial de Old Mutual México, apunta que el amor se parece mucho a una inversión, ya que si se definen objetivos financieros conjuntos y se establecen prioridades de gasto, se obtendrán mejores resultados. «Si invirtiéramos en nuestro futuro tanto como invertimos en regalos o detalles, cuando tenemos una relación, no tendríamos que preocuparnos por la jubilación», afirma Seañez.
Este experto recomienda a quienes tienen pareja no hacer gastos excesivos y privilegiar el ahorro de acuerdo con la necesidades personales a medio y largo plazo. De hecho, cree que el correcto manejo de las finanzas puede ser un factor de éxito en una relación de pareja. “Compartir metas y la prioridad que tiene cada una de ellas en su vida crea lazos fuertes de apoyo y unión. Las parejas que están en sintonía en temas como el ahorro y el presupuesto se sienten más seguras financieramente y discuten menos sobre el dinero».
Una relación óptima, tanto en el plano sentimental como el económico, es aquella que debe garantizarnos estar en la “mejor situación posible”, es decir, en donde sintamos que estamos recibiendo algo que compensa lo que entregamos.
Entre los consejos para disfrutar de unas finanzas sanas en pareja recomienda hacer un presupuesto que permita controlar gastos e incrementar el ahorro, contar con un fondo de emergencias equivalente a al menos seis meses de sueldo, contratar seguros para riesgos de desempleo, casa, coche o salud.
Además, es importante seguir un plan de ahorro disciplinado de al menos el 10% de los ingresos y no superar un endeudamineto del 35% de los ingresos mensuales netos.
Por último, es deseable diversificar la procedencia de los ingresos y elaborar un plan financiero para cada meta (vacaciones, estudios de los hijos, compra de una vivienda…).