Las operaciones del sector de salud han batido récords en 2018 situándose como el sector donde más operaciones se han realizado, asimismo, el valor global de las estas aumentó casi un 50% hasta alcanzar los 63.1000 millones de dólares, superando el nivel del año pasado de 42.600 millones de dólares.
El total de las operaciones aumentó a 316 en 2018, comparado con 265 en 2017, debido a la fuerte actividad de inversión en todas las regiones y en sectores como el de la tecnología de la información para la salud (HCIT por sus siglas en inglés), proveedores y biofarmacia.
Esto incluye 18 operaciones de más de mil millones de dólares cada una en la sanidad global, de forma que los activos de mayor tamaño quedan fuera del alcance de la mayoría de los compradores.
Estas conclusiones son fruto del informe de Bain & Company titulado, Global Health Care Private Equity & Corporate M&A, los cuales sostienen que la inestabilidad política y económica en el mundo han podido ser los dos factores determinantes que hayan motivado al inversor a decantarse por este sector.
“El año pasado fue un año particularmente bueno para las operaciones del sector salud”, indica Cira Cuberes, socia de la práctica de Private Equity en la oficina de Madrid de Bain & Company. “A pesar de la elevada volatilidad de los mercados y de algunos escenarios políticos que provocaron un fuerte sentimiento de inquietud entre la mayoría de los inversores profesionales durante el cuarto trimestre, las sólidas características del sector salud y el buen historial de su rendimiento fueron una referencia para los inversores que buscaban un refugio seguro. La combinación del exceso de capital disponible, una mayor captación de fondos y mayores asignaciones de fondos ha traído consigo un aumento de la competencia por los activos del sector salud que se intensificó a lo largo del año e, incluso hoy, no muestra signos de que vaya a disminuir”.
En 2018 se ha visto la mayor compra de la última década
El incremento del valor de las transacciones del sector sanitario se debe principalmente a las grandes adquisiciones, ya que ocho de las que tuvieron lugar en 2018 se valoraron en más de 2.000 millones de dólares cada una, en comparación con las cuatro registrados en 2017, y varias operaciones mega deals. A diferencia de 2017, cuando solo una de este tipo de operaciones se cerró, 2018 vio cuatro inversiones de más de 4.000 millones de dólares, incluida la mayor compra en al menos la última década.
Mientras que Norte América continuó registrando la mayoría de las operaciones y las valoraciones más altas, Europa y la zona Asia-Pacífico alcanzaron niveles de valoraciones históricas. En Europa, un puñado de grandes adquisiciones, incluyendo dos acuerdos del sector de la biofarmacia, llevaron a un aumento significativo en los valores de operaciones. En Asia-Pacífico el volumen del valor de las operaciones se incrementó un 44% a medida que los inversores intentaban aprovechar la demanda de una clase de consumidores de servicios médicos que ha seguido creciendo en los últimos años.
Por otro lado, el informe desprende que tanto el volumen de desinversiones como su valor descendieron en 2018 respecto al año anterior. Pasó de 116 en 2017 a 112 en 2018, registrando el nivel más bajo desde 2012.
Los inversores corporativos también impulsaron las fusiones y adquisiciones en este sector y registraron una cifra récord de 435.000 millones de dólares en 2018, superando el anterior récord de 432.000 millones alcanzado en 2015. En los últimos años, según indica el estudio, las compañías del sector sanitario han recurrido cada vez más a las fusiones y adquisiciones para obtener mayores ingresos y aumentar la base accionarial.
“Para conseguir operaciones en medio de una intensa competencia, los fondos adoptaron enfoques más creativos para las transacciones,” señala Cira Cuberes. “Los inversores también están expandiendo su tesis de creación de valor más allá de las categorías de adquisiciones tradicionales por segmentos o geografías para abordar el desafío de la expansión de múltiplos que probablemente se convierta en una palanca obsoleta para la rentabilidad.”
Los cuatro criterios que los inversores deben considerar
Según Bain & Company, los inversores necesitan expandir, acelerar e intensificar los procesos de adquisición de acuerdo con los siguientes cuatro criterios:
Desarrollar un manual claro y las capacidades correctas para la estrategia elegida. Cuando los inversores dedican mayores proporciones de sus fondos a inversiones en el sector salud y además afrontan una mayor competencia, su estrategia tiene que cambiar. La evaluación de las capacidades requeridas para el éxito y el fortalecimiento de las áreas exigidas por la estrategia de inversión será fundamental para los compradores en el futuro.
Establecer un plan de creación de valor. Dados los actuales niveles de las valoraciones, los múltiplos ya no pueden expandirse como antes. En cambio, los inversores deben obtener cada vez más beneficios provenientes del impulso comercial y operativo. Los compradores deben comenzar a desarrollar el plan de creación de valor durante la dilligence y crear, y hacer responsable al equipo directivo de la empresa participada, un plan ejecutivo que muestre el camino de forma clara hacia la creación de valor.
Ejecutar las «next-gen dilligence». Dado el aumento de la competencia por un conjunto limitado de activos, los fondos están ofreciendo mayores precios y se están moviendo rápidamente para conseguir operaciones. Los mejores inversores ya piensan sobre qué espacios y activos invertir en los próximos años y luego se posicionan de forma temprana para ganar. También se dan cuenta de que el análisis tradicional del mercado (market dilligence) ya no es suficiente.
Tomar un camino creativo. Los fondos no pueden seguir persiguiendo las adquisiciones tradicionales para obtener rentabilidad para los inversores. Las asociaciones, las inversiones de crecimiento y las privatizaciones son solo algunos de los enfoques creativos que están adoptando las empresas.
Mirando hacia el futuro
Según los autores del informe, la probabilidad de una recesión será palpable a lo largo de 2019 y la incertidumbre sociopolítica continuará. Sin embargo, en el pasado, los retornos en los mercados de capital privado del sector salud han demostrado ser resistentes a tales tormentas, y Bain & Company confía en que la demanda de los inversores por estos activos fundamentalmente fuertes y resistentes a la recesión perdurará. Los compradores con una sólida guía de actuación están mejor posicionados para tomar decisiones de inversión inteligentes que generarán grandes retornos en los próximos años.
Sin embargo, se sigue deliberando sobre si esta “cosecha” de beneficios de operaciones del sector sanitario será tan buena como las anteriores. A medida que la incertidumbre impregna los mercados de deuda y de renta variable, y los rendimientos de la expansión de múltiplos disminuyen, cada vez es más difícil justificar las operaciones.