Cada año que pasa esta generación de jóvenes universitarios nacidos después de 1982 se hace más conservadora. Al menos esa es la principal conclusión de la sexta encuesta anual de Deloitte Global, The Deloitte Millenial Survey 2017, que revela que, mientras hace un año se mostraban más propensos a dejar sus empleos, ahora son más fieles a sus puestos de trabajo. Casi dos tercios de los millennials prefieren el empleo a tiempo completo frente al trabajo freelance. “En un período de gran incertidumbre como el actual, la estabilidad laboral es atractiva y los millenials optan por rechazar ofertas de trabajo como freelances”, concluye el estudio.
Lo curioso de los resultados de la encuesta es que los millenials de los países desarrollados son más pesimistas que en los países emergentes. El 71% de los millenials en países emergentes confían en disfrutar de una situación financiera mejor que la de sus padres, mientras que en los países desarrollados ese porcentaje baja hasta el 36%.
Los millenials ven con buenos ojos a las empresas y creen que se están comportando de una manera cada vez más responsable. El 76% dice que, en general, están teniendo un impacto positivo en la sociedad en la que operan. Sin embargo, también creen que las multinacionales no están haciendo todo lo que pueden para aliviar los mayores desafíos de la sociedad.
Desde sus puestos de trabajo se sientes responsables y capaces de generar un impacto social. De hecho, según la encuesta, las oportunidades que les brindan sus empleadores para participar en “buenas causas” a nivel local, les proporcionan esa sensación de influencia que buscan. Desde un punto de vista político, no apoyan a los líderes que dividen con sus decisiones y sí se sienten más cómodos cuando éstos utilizan un lenguaje sencillo y directo. Con los que más se identifican es con los líderes que apelan a aquellas personas que puedan sentirse «dejadas de lado» o aisladas.
Su opinión sobre la generación Z (los que actualmente tienen 18 años o menos) es ampliamente positiva y son conscientes de que se trata de jóvenes con grandes habilidades en tecnología de la información y capacidad de pensar creativamente. Seis de cada diez millenials creen que la generación Z tendrá un impacto positivo a medida que se amplíe su presencia en el mundo laboral. Esta creencia es mayor en los mercados emergentes (70%) que en los mercados desarrollados (52%).