Los españoles seguimos engordando nuestra hucha. El ahorro financiero (ahorro en activos financieros) de las familias españolas se situó en 2,48 billones de euros a finales de junio de 2021, según datos de las cuentas financieras de la economía española difundidos por el Banco de España y presentadas por Inverco.
En este segundo trimestre del año y por activos, el instrumento financiero de referencia para las hogares han vuelto a ser las Instituciones de Inversión Colectiva (fondos y sociedades de inversión) con un crecimiento trimestral del 4,9%. En lo que va de año, las IIC experimentan un incremento del 10,3% y ya representan más del 15,4% del ahorro total de las familias españolas.
Por otro lado, los hogares españoles siguen acumulando sus ahorros en los depósitos. El 40,9% del total del ahorro financiero se encuentra en depósitos y efectivo. Un dato que sorprende con los datos sobre la inflación que inundan los medios de comunicación. Además, la cifra acumulada ha pasado por primera vez el billón de euros.
En el segundo trimestre del año, los hogares españoles incrementaron en casi 70.500 millones de euros su saldo en activos financieros, un 2,9% más que a finales del primer trimestre de 2021 y 4,8% más que en diciembre de 2020.
La mitad del incremento del ahorro financiero de los hogares (58.353 millones de euros) tuvo su origen en la revalorización de los activos por efecto mercado, la otra mitad (54.484 millones de euros) por nuevas adquisiciones de activos financieros.
En términos acumulados de cuatro trimestres, la adquisición neta de activos financieros por parte de las familias alcanzó en junio de 2021 el 5,9% de PIB, (68.810 millones de euros). Durante este período, los flujos financieros se concentraron casi exclusivamente en los depósitos/efectivo (53.197 millones de euros) e IIC, con flujos de entrada positivos de 28.880 millones de euros, de los cuales más del 40% han correspondido al segundo trimestre (11.672 millones de euros).
La riqueza financiera neta de los hogares, resultado de minorar el saldo de activos financieros con los pasivos incurridos por las familias, experimentó en junio un nuevo máximo histórico, y se situó en 1,71 billones de euros (147,9% del PIB nacional).