La Federación Interamericana de Empresas de Seguros (FIDES) defiende la existencia de un marco de reglas homogéneo para todos los operadores de seguros ante el desarrollo de las nuevas tecnologías por su potencial impacto sobre esta industria. Esta organización multinacional empresarial publicó el 14 de noviembre la Declaración de San Salvador. En el documento se exponen las conclusiones de la XXXVI Conferencia Hemisférica de Seguros celebrada este mes en la capital de El Salvador.
La declaración elaborada por FIDES reconoce que la “tecnología es una herramienta que hace más eficientes los procesos de las entidades aseguradoras, generando mejores condiciones para los clientes de seguros”. Sin embargo, añade el escrito, “también entraña riesgos que deben ser vigilados”. En concreto, apunta a las llamadas Insurtech, las firmas tecnológicas especializadas en alguna faceta del proceso asegurador aparecidas en los últimos años al calor de la innovación tecnológica.
FIDES llama la atención sobre el riesgo que supone que algunas de estas compañías “tomen riesgos y no estén constituidas como entidades aseguradoras”
Ante esta situación, la federación reclama que se aplique el principio “A igual actividad, mismas reglas”. Es decir, que todos los operadores de seguros queden sometidos a un mismo marco normativo por parte de las respectivas legislaciones y supervisores nacionales.
FIDES se muestra partidaria de la creación de entornos de pruebas (llamados sandboxes en el argot sectorial) que permitan la experimentación y la adopción de innovaciones en el seguro. Dichos entornos se encontrarían debidamente vigilados por las autoridades supervisoras y tendrían una duración limitada en el tiempo que permita contrastar el funcionamiento de tal o cual novedad y su impacto sobre el seguro.
Para FIDES, las start-ups que se desarrollen por esta vía deberían en un momento dado “constituirse en instituciones de seguros con todas las garantías que requiere el desarrollo de esta actividad (solvencia, reservas, sistema de gobierno y protección al consumidor)”. Los bancos de pruebas, añade, deberían estar abiertos a los operadores de seguros existentes. Es decir, no deben ser de acceso exclusivo para las firmas de nuevo cuño.
En el marco de la Conferencia Hemisférica se celebró, también, la asamblea anual de FIDES. Las asociaciones de aseguradoras de América Latina, EEUU y España eligieron como nuevo presidente de la federación a Luis Enrique Bandera, vicepresidente primero de la Asociación Panameña de Aseguradores (APADEA). Este directivo toma el relevo al frente de FIDES de la española Pilar González de Frutos, presidenta de UNESPA. Una vez concluido su mandato estatutario de dos años, González de Frutos pasa a convertirse en miembro del Consejo de Presidencia de FIDES y adquiere el estatus de past president.
FIDES también ha nombrado a Francisco Astelarra como nuevo secretario general. Este directivo argentino será el encargado de llevar el día a día de la federación a partir del 1 de enero 2018. Sustituye en el cargo al peruano Raúl de Andrea quien se retira tras haber gestionado FIDES con gran profesionalidad en los últimos años.
La labor del seguro
La XXXVI Conferencia Hemisférica de Seguros fue el marco en el que se presentó de «El rol social del seguro latinoamericano». Esta obra deja constancia por primera vez del papel que juega la industria aseguradora en el hemisferio americano. El trabajo da cuenta de que existen 1.916 aseguradoras en América Latina, de las cuales un 70% se encuentra en Brasil. La tasa de prima media por habitante en la región ronda los 300 euros. El seguro de no vida tiene una presencia más extensa que el de vida en todos los países, a excepción de dos mercados: El Salvador y Chile. Cada año, las aseguradoras desembolsan 73.000 millones de dólares por percances en la región.
Con este dinero se resuelven los problemas de los clientes. Dentro de esta cantidad se incluyen 18.500 millones dedicados al pago de prestaciones por productos de pensiones y otros 35.500 millones correspondientes a atenciones del seguro de salud.
El rol social del seguro incluye también una descripción de las inversiones financieras de las familias de algunos países latinoamericanos, así como un capítulo dedicado íntegramente al fenómeno del microseguro y la inclusión financiera.