Tras varias semanas de negociaciones con el Departamento de Justicia, la Reserva Federal y el Departamento de Servicios Financieros del Estado de Nueva York, el banco suizo Credit Suisse acordaba este lunes el pago de 2.500 millones de dólares al Gobierno estadounidense al admitir su culpabilidad por conspirar para evadir impuestos, con lo que se convierte en el primer gran banco que admite su culpabilidad en dos décadas en suelo estadounidense. Para ver otro caso similar hay que remontarse a 1995, año en el que el japonés Daiwa Bank reconoció ser culpable de ocultar pérdidas a los reguladores.
Credit Suisse reconocía así haber asesorado financieramente a sus clientes estadounidenses para poder evadir impuestos bajo la protección del secreto bancario. La multa de 2.500 millones de dólares es la suma del castigo impuesto por parte de las tres agencias. Además, la Reserva Federal ha emitido una orden en la que exige a la entidad suiza hacer frente rápidamente a las deficiencias en supervisión, gestión y control que rigen bajo el cumplimiento de las leyes de Estados Unidos. Justicia se llevará 1.800 millones, 100 millones la Reserva Federal y más de 600 el Departamento de Servicios Financieros del Estado de Nueva York.
La citada orden obliga a Credit Suisse a que complete sus esfuerzos para poner en marcha los programas y políticas que garanticen que el banco realiza sus operaciones en Estados Unidos y en todo el mundo en plena conformidad y de acuerdo a las leyes bancarias estadounidenses y las actuales normas del Departamento de Justicia y el Departamento de Servicios Financieros del Estado de Nueva York, informó el Departamento de Justicia en un comunicado.
Fin a la relación laboral
Asimismo, Credit Suisse se ha comprometido a poner fin a su relación con los nueve individuos que estuvieron involucrados en las acciones que resultaron en la violación de las leyes estadounidenses, así como a no volverlos a emplear ni a tener ninguna relación con ellos en cualquier otra actividad. Además de estas medidas relacionadas con la entidad suiza, la Reserva Federal está investigando si otros individuos podrían haber participado en este tipo de acciones contra las leyes bancarias estadounidenses para apartarlas del negocio bancario, lo que podría incluir multas y órdenes que prohíben a determinados individuos participar en el negocio de banca, incluido el trabajar para cualquier institución bajo la jurisdicción estadounidense. Credit Suisse se ha comprometido a colaborar en estas investigaciones, aunque no es objeto de las mismas.
Tras esta multa y el reconocimiento de su culpabilidad, se desconoce cuál será el futuro del gigante suizo en territorio estadounidense, tal y como coinciden en afirmar los principales diarios económicos de Estados Unidos, que recuerdan además que la multa impuesta a Credit Suisse es muy superior a la que hace cinco años se le impuso a otro banco suizo por un caso similar, cuando UBS fue multada entonces con 780 millones de dólares. Aunque UBS sí facilitó a las autoridades estadounidenses los nombres de los titulares de las cuentas que se emplearon para evadir impuestos, algo a lo que Credit Suisse no se ha comprometido por el momento. También se especula sobre el futuro del consejero delegado de Credit Suisse, el estadounidense Brady Dougan, y su presidente, Urs Rohner.
Otros 13 bancos suizos
Desde el Departamento de Justicia también se apuntaba este lunes en una conferencia de prensa que se han realizado notables operaciones en los últimos meses para combatir el uso de cuentas bancarias en el extranjero para evadir impuestos en Estados Unidos. De las personas identificadas en ayudar a Credit Suisse en este caso, dos de ellas se han declarado culpables recientemente. En enero de 2013, otro banco suizo, Wegellin Bank, se declaró culpable de conspiración para evadir impuestos. En este sentido, el Departamento de Justicia apuntaba este lunes que ya han identificado a otros 13 bancos suizos por conducta similar.
Recientemente una empresa de gestión de activos en Suiza, Swisspartners Group, llegó a un acuerdo de varios millones de dólares con la oficina del fiscal de Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York. Asimismo, explicaron que 100 bancos suizos se han sumado a un programa implementado en conjunto con las autoridades suizas. Bajo este programa, estos bancos, que no están bajo investigación, pagarán multas por la violación de las leyes norteamericanas que se cometan a través de sus instituciones, además de que proveerán información que lleve a identificar a sus clientes estadounidenses que hayan evadido impuestos. Por último, desde Justicia explicaron también que más de 43.000 contribuyentes estadounidenses se han adherido al programa de revelación voluntaria del IRS y pagado más de 6.000 millones de dólares en impuestos atrasados y multas al Tesoro de Estados Unidos.