El Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés) ha multado al banco estadounidense Citigroup con 51,3 millones de euros (43,9 millones de libras) por «fallos en sus controles internos y acuerdos de gobernanza que sustentan el cumplimiento de los requisitos de información regulatoria con la Autoridad de Regulación Prudencial», según ha explicado el banco central el pasado martes en un comunicado.
En concreto, el BoE ha indicado que tres filiales de Citigroup (Citigroup Global Markets, la filial de Londres de Citibank NA y la filial británica de Citibank Europe) no tenían «diseñado, implementado o funcionando de forma efectiva» el marco de información regulatoria entre junio de 2014 y diciembre de 2018”.
Según la entidad monetaria, “aunque Citi permaneció en superávit con respecto a sus requisitos de capital y de liquidez en ese periodo, los fallos continuaron durante un periodo de tiempo significativo y fueron serios y amplios en naturaleza».
Por su parte, Citi asegura haber solucionado ya los problemas de sus informes regulatorios, que habían sido detectados con anterioridad. “Como el aviso de la Autoridad de Regulación Prudencial (PRA) deja en claro, los problemas identificados se relacionan con el proceso de presentación de informes y, durante todo el período que se examina, las entidades relevantes de Citi UK se mantuvieron excedentes en sus requisitos de liquidez y capital en todo momento”, ha señalado la entidad en un comunicado.
En este sentido, el banco ha querido dejar claro que siempre ha dado prioridad al cumplimiento de los requisitos que exigen los informes regulatorios, para cual ha dedicado “recursos significativos”. Además, afirma que la PRA reconoce que Citi ha realizado mejoras estratégicas “sustanciales” en sus informes regulatorios en el Reino Unido, y también ha revisado los sistemas y controles que sustentan su marco de informes regulatorios. «Citi cooperó completamente con la PRA durante todo el proceso, y en 2019 una firma independiente líder de contabilidad y auditoría confirmó que Citi había solucionado los problemas materiales identificados», explica la entidad.