Las expectativas de mercado sobre el comportamiento futuro en bolsa de determinados valores, o sectores, gracias a la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales estadounidenses quedaron claras el mismo miércoles 9 de noviembre. Horas después de que Trump fuera proclamado presidente electo, la fortuna de Warren Buffett aumentaba en 1.700 millones de dólares, según cálculos de Forbes. Un día más tarde, el jueves 10, el buen comportamiento en bolsa de la firma de inversión Berkshire Hathaway sumó otros 2.000 millones de dólares a la fortuna de Warren Bufett.
Forbes estima que desde el cierre de mercados del viernes pasado, el patrimonio de Buffett ha crecido en 6.600 millones, y sitúa su riqueza actual en 70.600 millones de dólares. El inversor vuelve, así, a ser el tercer hombre más rico del mundo en el ranking de milmillonarios de Forbes, pasando a Jeff Bezos, que le había superado –a él y a Carlos Slim- en el ranking. Según la publicación, a 16 de noviembre de 2016 su fortuna solo está por detrás de las de Bill Gates y Amancio Ortega, valoradas en 82.000 y 71.800 millones de dólares respectivamente.
La fortuna del mexicano Carlos Slim fue la que mayores pérdidas registró el jueves pasado del famoso ranking, con hasta 3.700 millones de dólares en una sola jornada, para situarse hoy en 46.500 millones y ocupar la séptima posición.
Las acciones de Berkshire Hathaway marcaron un récord el jueves –igual que el promedio industrial Dow Jones- y Buffett posee el 18% de los títulos de la firma de inversión. Sin embargo, para otros milmillonarios, especialmente para los del sector tecnológico, el resultado de las elecciones ha tenido el efecto contrario. Siempre según la publicación, las pérdidas las encabeza la fortuna de Jeff Bezos, CEO de Amazon, que encadenó caídas de 1.300 y 2.400 millones de dólares, el miércoles y jueves, acompañando el recorte del 4% de las acciones de Amazon del jueves. LA fortuna de Bezos está estimada en 64.700 millones de dólares, a día de hoy.
Pero no fue el único del sector, el patrimonio del CEO de Facebook, Mark Zuckerberg, cayó 1.000 millones para situarse en 51.700; y las de Larry Page y Sergey Brin, cofundadores de Google, bajaron a 38.000 y 37.100 millones de dólares, respectivamente, tras perder cerca de 1.000 millones de dólares cada uno.