El cambio climático sube hasta su posición histórica más alta, el séptimo puesto, en el Barómetro de Riesgos Allianz 2020, y ya figura entre los tres principales riesgos en el conjunto de la región Asia-Pacífico, según expertos en gestión de riesgo de países y territorios como Australia, Hong Kong, la India e Indonesia.
El aumento en las pérdidas físicas es el riesgo que más temen las empresas (49% de las respuestas), ya que la subida del nivel del mar, sequías más extremas, tormentas más devastadoras y grandes inundaciones representan amenazas para plantas y otros activos, así como para las vías de transporte y energía que mantienen unidas las cadenas de suministro. En esta línea, las empresas se muestran preocupadas por el impacto operativo del cambio climático – con consecuencias como reubicación de instalaciones- (37%), y por los posibles impactos de mercado y regulatorios (35 y 33%, respectivamente).
Un gran número de industrias se enfrentan a grandes riesgos (y gastos) para garantizar que sus futuros modelos de negocios sean más respetuosos con el clima. En general, Allianz ha estimado que responder a los desafíos planteados por el cambio climático podría costar a las empresas de todo el mundo hasta 2,5 billones de dólares en los próximos 10 años con el propósito de hacer que el sector energético sea más «verde». Las industrias automotriz, química y agrícola son algunos de los demás sectores que se verán particularmente afectados. Por otro lado, las compañías tendrán que prepararse para una mayor litigiosidad futura: hasta la fecha, ya se han presentado demandas asociadas al cambio climático contra «grandes generadoras de carbono» en al menos treinta países del mundo.
Según Marisa Aguilar, directora general de Allianz Global Investors para Iberia: “El calentamiento global no sólo es real, muy real, sino que está ocurriendo más deprisa de lo que inicialmente se pensaba, por lo que las medidas necesarias para mitigarlo y revertirlo son urgentes y requieren de una acción coordinada de gobiernos, empresas e inversores. La magnitud de la transición a realizar no tiene precedentes en nuestra historia, e implica una reducción pronunciada de emisiones en todos los sectores, un diseño de un abanico de medidas de mitigación que operen conjuntamente y, obviamente, un incremento muy significativo de las inversiones necesarias para hacer posible dichas medidas”.
Los riesgos cibernéticos preocupan más que la pérdida de beneficios
Por otra parte, por primera vez en la historia, los incidentes cibernéticos (con un 39% de respuestas) aparecen como el más importante riesgo para las empresas a escala mundial en este barómetro, relegando al que hasta ahora había siempre sido el primer riesgo, la pérdida de beneficios, a la segunda posición (con un 37% de respuestas). La concienciación acerca del riesgo cibernético ha crecido rápidamente estos últimos años, impulsada por la creciente importancia que los datos y sistemas informáticos han adquirido para las empresas, así como por varios incidentes de gran resonancia. En tan solo siete años, el riesgo cibernético ha escalado posiciones desde la 15.ª posición, con apenas un 6% de respuestas.
Los cambios legislativos y normativos (terceros, con un 27%) y el cambio climático (séptimo, con un 17%) son los riesgos que más suben en todo el mundo, como reflejo de la creciente preocupación que empresas y naciones muestran por la guerra comercial entre los Estados Unidos y China, el brexit y el calentamiento global. El informe anual sobre riesgos globales para las empresas elaborado por Allianz Global Corporate & Specialty (AGCS) incorpora la opinión de 2.718 expertos de más de cien países, cifra récord entre la que figuran ejecutivos, gestores de riesgos, intermediarios y expertos en seguros.
En el caso de España, los incidentes cibernéticos son también por primera vez el mayor riesgo para las empresas según los expertos consultados, una posición quizá motivada por las crisis sufridas por varias empresas españolas durante 2019. El cambio climático, los riesgos medioambientales y especialmente las catástrofes naturales (con el tercer lugar en el ranking) otros de los factores más preocupantes para las compañías en nuestro país tras las olas de calor extremo y las grandes inundaciones que han afectado gravemente varias zonas del país en los últimos meses.
Según Joachim Müller, director general de AGCS: «El barómetro pone de manifiesto que el riesgo cibernético y el cambio climático son dos importantes desafíos que las empresas deberán vigilar con atención en esta nueva década. Por supuesto, existen otros muchos escenarios de daños e interrupción de actividad a los que prestar atención, no obstante, si los consejos de administración y los gestores de riesgos no contemplan estos dos riesgos, es más que probable que los resultados operativos y financieros, así como la reputación de las empresas, se vean gravemente afectados. La preparación y planificación frente a los riesgos cibernéticos y de cambio climático son una cuestión tanto de ventaja competitiva como de resiliencia en la era de la digitalización y el calentamiento global».