Novedades en el sector bancario español. BBVA ha acordado la venta de su filial en Estados Unidos al grupo de servicios financieros PNC por un precio de, aproximadamente, 11.600 millones de dólares (9.700 millones de euros) en efectivo.
Según ha explicado la entidad en un comunicado, este precio representa 19,7 veces el resultado obtenido por la unidad en 2019 y equivale a cerca del 50% del valor en bolsa actual de BBVA, por lo que la operación “crea un enorme valor para los accionistas”. La transacción tendrá un impacto positivo en el ratio de capital CET1 fully loaded de BBVA de cerca de 300 puntos básicos, equivalente a 8.500 millones de euros de generación de CET1.
“Esta es una gran operación para todas las partes. PNC ha reconocido el enorme valor de nuestro negocio, nuestros clientes y nuestro gran equipo en Estados Unidos, que formarán parte de un grupo financiero líder en el país. El acuerdo fortalece nuestra ya sólida posición financiera. Nos aporta mucha flexibilidad para invertir de forma rentable en nuestros mercados, impulsando nuestro crecimiento a largo plazo y apoyando a las economías en la fase de recuperación, así como para incrementar la remuneración al accionista”, señala Carlos Torres Vila, presidente de BBVA.
En Estados Unidos, BBVA está presente en la región del Sunbelt, con más de 100.000 millones de dólares en activos, 637 oficinas y posiciones de liderazgo en Texas, Alabama y Arizona. Una vez se complete la operación, PNC, con sede en Pittsburgh (Pensilvania), se convertirá en el quinto banco más grande del país por activos. La transacción excluye el broker dealer BBVA Securities y la sucursal de Nueva York, a través de los cuales BBVA seguirá prestando servicios de banca corporativa y de inversión a sus grandes clientes corporativos e institucionales. Adicionalmente, BBVA mantiene la oficina de representación en San Francisco y el fondo de inversión en fintech Propel Venture Partners.
Por su parte, William S. Demchak, presidente y CEO de PNC, ha declarado: “La adquisición acelerará nuestra trayectoria de crecimiento y aportará valor a largo plazo para el accionista. Esta operación es una oportunidad para caminar hacia el futuro desde una posición de fortaleza, acelerando la expansión de PNC, aprovechando nuestra experiencia en adquisiciones. Nos satisface enormemente poder aportar nuestra tecnología líder y nuestros productos y servicios innovadores a nuevos mercados y clientes, aunando el compromiso que ambos bancos compartimos de formar equipos diversos de alto rendimiento y de apoyar a las comunidades donde operamos”.
PNC: el quinto mayor banco retail
Para PNC esta compra le convierte en el quinto mayor banco retail de Estados Unidos, por detrás de JP Morgan Chase, Bank of America, Wells Fargo y Citigroup. En particular, esta operación le dará a PNC una mayor presencia en mercados con un importante potencial de crecimiento más allá de su actual presencia en el medio oeste y el medio atlántico, sobre todo en Texas. Además, de mejorar su presencia geográfica, reforzará su negocio de banca comercial y de consumo.
Esta operación llega seis meses después de que PNC saliera del accionariado de BlackRock tras vender su participación del 22,4%. En aquel momento, la entidad estadounidense posee 34,8 millones de acciones ordinarias y acciones preferentes convertibles de la Serie B en BlackRock, que se convirtieron en acciones ordinarias al momento de la venta. Ambas operaciones tendrían cierta relación, tal y como ha señalado Demchak en declaraciones al Financial Times: “Hemos gestionado cambiar la propiedad de BlackRock por una franquicia que nos va a llevar de costa a costa. BBVA está en los mejores mercados del país, con una presencia sustancial en Texas, Arizona, California y Denver, además de en Alabama y Florida”.
Según explican desde la entidad estadounidense, el precio de compra se estima en un 134% del valor contable tangible de BBVA USA, según su balance al 30 de septiembre de 2020, y refleja una prima de depósito del 3,7%.Además, esta adquisición añade aproximadamente 86.000 millones de dólares de depósitos y 66.000 millones de dólares de préstamos, según las cuentas del BBVA USA. Tras el cierre de la compra, la provisión para pérdidas por créditos estimada para el total de los préstamos de la entidad combinada es del 2,85%, incluyendo las reservas para los préstamos adquiridos de BBVA USA del 3,85%.
Por su parte, PNC espera incurrir en costes de fusión e integración de 980 millones de dólares, incluyendo aproximadamente 250 millones de dólares en cancelaciones de partidas capitalizadas, y lograr ahorros por más de 900 millones de dólares, o el 35% de los gastos anuales estimados sin intereses de BBVA USA para el año 2022 a través de mejoras en la eficiencia operativa y administrativa.
Detalles de la operación
Sobre los detalles de la operación, desde BBVA matizan que la oferta 100% en efectivo de PNC valora el negocio vendido a 19,7 veces su resultado en 2019 y a 1,34 veces su patrimonio tangible a 30 de septiembre de 2020. Asimismo, la transacción aflora el valor de la filial pues el precio representa más de 2,5 veces la valoración media que asignan los analistas a la franquicia (3.800 millones de euros), por un negocio que supuso menos del 10%(3) del beneficio atribuido del Grupo en 2019. Además el precio equivale a casi el 50% del actual valor en bolsa de BBVA.
La venta generará una plusvalía neta de impuestos de unos 580 millones de euros y el patrimonio tangible se incrementará en 1.400 millones de euros. Por último, se estima que la operación se cerrará a mediados de 2021, una vez se obtengan las autorizaciones regulatorias necesarias.
Sin duda esta operación supone un impulso para la acción del banco en bolsa, que esta mañana se ha disparado en bolsa un 20% tras comunicar la noticia. Este buen comportamiento de la acción ha despertado los primeros comentarios y valoraciones. Por ejemplo el portavoz de eToro en España, Javier Molina, advierte, por un lado, de los niveles de sobrecompra en el caso de BBVA: “La fuerza del movimiento actual lo coloca en zona de sobrecompra y debemos ser prudentes al respecto”. Y, por otro, apunta que estos movimientos pueden marcar el principio de una senda alcista para la banca europea.
“Tras los anuncios de una vacuna que ayude a salir de la crisis sanitaria y económica que estaríamos padeciendo, este sector tan castigado en bolsa puede empezar a recibir cierto interés inversor. Desde un punto de vista de valoración, los bancos europeos y los españoles en particular, están cotizando a ratios valor en libros por debajo de 0,4 veces. En un contexto donde las medidas de expansión económicas y fiscales permanecerán activas, la noticia de la vacuna puede suponer el inicio de la recuperación de un sector muy infravalorado”, detalla Javier Molina.
La decisión tomada por BBVA, que durante el fin de semana sonó como un fuerte rumor en la presenta económica, no es la única operación de este tipo que se ha producido en el mercado recientemente. Según apuntan desde Reuters, «otros entidades europeas como el Deutsche Bank y el HSBC también han reducido sus operaciones en Estados Unidos». También, la publicación destaca que este tipo de movimientos corporativos podrían ser una consecuencia de la flexibilización de los reglamentos financieros y de la reducción de los impuestos de sociedades aprobados bajo la presidencia de Donald Trump, lo que habría dado «valor» a las entidades locales para buscar fórmulas para ganar escala en el mercado a través de acuerdo o compras.