Los bancos continúan ampliando sus medidas para paliar los efectos del COVID-19. Muchos ya han adelantado el pago por prestación de desempleo, eliminado las comisiones por sacar dinero en los cajeros e incluso disminuido o eliminado los dividendos. Empezando ya la cuarta semana desde que se declarase el estado de alarma, las entidades financieras siguen poniendo toda la carne en el asador para mitigar los efectos que pueda causar la pandemia a sus clientes. Estas son algunas de sus nuevas medidas:
Adelanto del pago de la prestación por desempleo
Con el objetivo de reducir el efecto en las economías familiares de la situación generada por el coronavirus, ya son varias entidades las que se han decidido a anticipar el pago de la prestación por desempleo a los clientes que tengan esta ayuda. Bankinter es una de las entidades que se ha sumado a esta iniciativa. Lo habitual es que el banco abone esta prestación el día 10 de cada mes, pero, en abril ha ordenado una emisión anticipada del pago para que se ejecute con siete días de adelanto. Bankia también ha implantado esta medida, de la que se beneficiarán más de 256.000 clientes.
Todos los clientes de CaixaBank con derecho a prestación por desempleo y que hayan cobrado la misma el mes pasado también podrán disponer de esos fondos en sus cuentas siete días antes de lo habitual. El procedimiento no requerirá de ninguna petición ni trámite administrativo extraordinario, ya que se realizará de forma automática. Una medida que también han implementado Unicaja Banco y Cajamar.
Por su parte, las asociaciones AEB, CECA y UNACC, en colaboración con el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), han anunciado que trabajan para que las entidades de crédito puedan adelantar el pago de las prestaciones de desempleo con el fin de contribuir a paliar las consecuencias de la crisis sanitaria sobre los colectivos más vulnerables. Asimismo, han comunicado que las entidades de crédito se comprometen a no vincular los créditos ICO a cualquier otro producto bancario.
Moratorias hipotecarias
CaixaBank ha decidido ampliar hasta septiembre la moratoria hipotecaria para los afectados por el COVID-19, con el objetivo de contribuir a la mejora de la economía familiar de todos sus clientes en situación vulnerable. La operativa online de CaixaBank permite ya realizar la solicitud tanto a trabajadores como empresarios autónomos que hayan perdido su empleo o sufrido una caída en sus ventas de más del 40%.
Para ayudar a los colectivos más vulnerables, Caja de Ingenieros también se ha adherido a la moratoria de la cuota de la hipoteca de adquisición de vivienda, que implica la suspensión de la deuda durante la vigencia del estado de alarma, de la cláusula de vencimiento anticipado y del pago de la cuota.
Las entidades de crédito integradas en la AEB y la CECA se han unido para poner en marcha de manera voluntaria una nueva medida para ayudar a los clientes afectados económicamente por la crisis del coronavirus. Se trata de un aplazamiento de hasta doce meses en la amortización del capital para aquellas personas con una hipoteca sobre primera vivienda que así lo soliciten. Asimismo, se difiere el pago del principal en contratos de préstamos personales ligados a consumo para un periodo de hasta seis meses. Esto supone que los clientes sólo pagarán los intereses correspondientes de dichos préstamos, lo que reducirá sensiblemente la cantidad que venían pagando hasta ahora.
Sacar dinero en cualquier cajero sin pagar comisiones
Las entidades de CECA han tomado la decisión de eliminar para sus clientes el cobro de comisiones por retirada de efectivo a débito en cualquier cajero automático del país desde el 30 de marzo y mientras siga vigente el estado de alarma. Con ello, se contribuye a reducir los desplazamientos y cumplir las recomendaciones de las autoridades en materia de movilidad. Las entidades de crédito asociadas a CECA y que han adoptado esta medida son CaixaBank, Bankia, Kutxabank, Abanca, Unicaja Banco, Ibercaja Banco, Liberbank, Caixa Ontinyent y Caixa Pollença.
La banca cooperativa Cajamar tampoco cobrará por sacar dinero en cajeros de otras entidades financieras y mientras estén vigentes las medidas extraordinarias con motivo de la situación ocasionada por el COVID-19. Así, todos aquellos clientes que necesiten retirar efectivo a débito o a crédito podrán acudir al cajero automático más cercano, independientemente de la entidad financiera a la que pertenezca, evitando así los desplazamientos y posibles contagios.
Asimismo, ampliará temporalmente de 20 euros a 50 el “límite del pago contactless” en sus tarjetas. De esta forma, en los pagos por debajo de 50 euros, el titular de la tarjeta no tendrá que teclear el PIN en el terminal, evitando así el contacto y la posibilidad de contagio. Una iniciativa que también ha seguido la Caja de Ingenieros y Unicaja Banco.
Líneas especiales de financiación
Cajamar ha seguido ampliado su paquete de medidas y ha puesto a disposición de empresas, pymes y autónomos líneas especiales de financiación para que puedan responder a pagos pendientes a proveedores, organismos públicos y empleados, entre otros, derivados de las circunstancias actuales. Estas líneas además adaptan las condiciones de liquidación a las necesidades del cliente, ofreciendo una carencia de hasta un año sin coste y con un plazo máximo de amortización de cinco años para amortiguar shocks de liquidez.
Las empresas, pymes y autónomos podrán solicitar el importe que necesiten para sus pagos de nóminas, mercancía, impuestos, así como para atender sus necesidades de crédito, factoring, confirming, línea de descuento y circulante en general, entre otras.
En cuanto al paquete de medidas de la Caja de Ingenieros aprobado para particulares, la entidad ha ampliado el importe del Anticipo Nómina para los socios con la nómina domiciliada, de a 1 a 1,5 veces, así como su plazo de devolución de 2 a 6 meses. Asimismo, la entidad ampliará el límite de las tarjetas de crédito para los particulares y profesionales con más actividad cooperativizada, suponiendo un incremento del 57% respecto a los límites anteriores. Por otro lado, con el objetivo de mejorar las condiciones de compras con fraccionamiento a través de tarjetas de crédito, reducirá el tipo de interés de los pagos aplazados. También facilitará que sus socios puedan acceder a préstamos personales de forma no presencial de hasta 30.000 euros.
En cuanto al ámbito empresarial y profesional, implementará la exención de la comisión por mantenimiento de TPV (Terminal Punto de Venta) para aquellos comercios afectados por el estado de alarma, una medida ya aplicada a la comisión del mes de marzo que se mantendrá vigente y se adaptará mientras dure esta situación excepcional.
Por su parte, Bankinter mantendrá las ventajas de su Cuenta Nómina a quienes bajen del umbral mínimo de ingresos requerido por impacto del coronavirus. La entidad flexibiliza las condiciones a los actuales titulares de la Cuenta Nómina y Cuenta Profesional que hayan visto disminuidos sus ingresos con motivo de esta crisis, y que por tal motivo no alcancen los 1.000 euros netos mensuales requeridos. Todo ello con el objetivo de que quienes ya disponen de este producto puedan seguir disfrutando de sus ventajas diferenciales.
Unicaja Banco también pondrá en marcha medidas como, en particulares, la flexibilidad en fórmulas de financiación y la aplicación de la moratoria de deuda aprobada por el Gobierno para colectivos en situación de vulnerabilidad. En empresas y autónomos, condiciones flexibles de financiación y acceso a la línea ICO de avales públicos. Y en comercios, la exención de la comisión de mantenimiento de los terminales físicos y facilidades para sus gestiones telemáticas. La entidad también ofrece a los titulares de seguros de vida y de accidentes la posibilidad de fraccionar sin recargo las primas de sus seguros.
Cancelación y reducción de dividendos
En un ejercicio de prudencia y responsabilidad social, el Consejo de Administración de CaixaBank ha decidido reducir el dividendo en efectivo propuesto para el ejercicio 2019 a 0,07 euros por acción desde 0,15 euros por acción (a pagar el próximo 15 de abril), y modificar la política de dividendos para el ejercicio 2020 consistente en la distribución de un dividendo en efectivo superior al 50% del beneficio neto reportado, pasando a la distribución de un dividendo en efectivo no superior al 30% del beneficio neto reportado.
Con el fin de acomodar la posición del banco al nuevo entorno, y tras considerar nuevos aspectos regulatorios y supervisores, el Consejo ha acordado reducir al 11,5% el objetivo de la ratio de solvencia CET1 desde el 12% anteriormente establecido. El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha manifestado su intención de renunciar a la remuneración variable correspondiente al año 2020.
Por su parte, el consejo del Banco Santander también ha decidido cancelar la política de dividendos para 2020. Con ello, Santander tiene la capacidad de conceder 60.000 millones de euros adicionales en créditos. Asimismo, el consejo decidió, en línea con la recomendación del BCE, suspender el pago del dividendo complementario de 2019.
El presidente, el consejero delegado, los consejeros ejecutivos y la alta dirección de Banco Sabadell renuncian al cobro de la retribución variable del año 2020. También han renunciado al cobro de la retribución variable los miembros del Comité de Dirección de la filial británica TSB. Según ha manifestado Josep Oliu, presidente de la entidad, “es un acto de responsabilidad en un momento en el que todos debemos actuar con el máximo compromiso y solidaridad. Con esta decisión queremos sumarnos al esfuerzo que en este momento está haciendo toda la sociedad y en particular, todos los empleados del banco que cada día hacen posible la continuidad de una labor esencial como la atención y el acompañamiento a los clientes”