El impacto de los cuatro nuevos jugadores tecnológicos ( American BigTechs, AsianTechs, Neo y Challengers Banks y FinTechs) en la rentabilidad financiera (ROE) de los bancos en el plazo de de cinco años puede alcanzar el 4,6% frente al 9% actual, según un nuevo estudio de la consultora Finnovating, que considera su efecto en dos variables: pérdida de cuota de mercado y erosión en el margen de beneficios.
Para afrontar este nuevo escenario existen dos estrategias: la primera, la puesta en marcha de una transformación digital interna, en la que las grandes entidades han invertido entre un 15 y un 20% de sus beneficios.
La segunda, la innovación abierta, es la menos explorada y la que más oportunidades generará en los próximos cinco años, ya que puede aportar a las entidades financieras que apuesten por ella hasta un 3,1% de rentabilidad financiera. Este tipo de innovación se basa en la colaboración con ecosistemas X-Tech (FinTech, InsurTech, RegTech…) existentes con expertos en la identificación, co-creación, integración e inversión en la innovación desarrollada por estas startups y scaleups.
Según los datos extraídos, Rodrigo García de la Cruz, CEO de Finnovating, destaca que “este estudio demuestra que durante los próximos cinco años veremos grandes ganadores y perdedores en el sector financiero y aquellos bancos que quieran liderar la banca del futuro deberán desarrollar la innovación abierta hasta convertirse en plataformas abiertas que conecten con todos los nuevos agentes del sector. Para ello serán necesaria una ‘APIficación’ completa, aprovechando las oportunidades del PSD2 y PSD3, el uso intensivo de los Sandbox de las distintas jurisdicciones y el Open Banking internacional para conectar con la innovación fintech global, apoyándose en una red de colaboradores externos que identifiquen e implementen los últimos modelos de negocio”.
Los cuatro grandes competidores: las GAFAP, las AsianTech, Neo Banks y Fintechs
Los cuatro grandes grupos de competidores analizados en este informe incluyen a las bigtech americanas, es decir, las GAFAP (Google, Amazon, Facebook, Apple y Paypal). Sumando sus varios miles de millones de usuarios, que superan a los clientes de los grandes bancos, su enorme volumen de datos, gran capital y apetito de expansión, se calcula su impacto total sobre la rentabilidad financiera bancaria en un 1’3%, con mayor erosión en la cuota de mercado.
Las «Asian tech», las grandes compañías tecnologías de Asia (WechatPay, Alipay y la compañía de seguros ZhongAn) con un desarrollo financiero mayor que el de sus equivalentes americanas, ya han expandido sus negocios más allá de sus países de origen. Por ejemplo, en 2017 se efectuaron pagos móviles en China por valor de más de 15’4 billones de dólares, mientras Visa o MasterCard contabilizaron 12’5 billones de dólares. Con estos datos se estima el efecto de las compañías asiáticas en un 1’2%.
Además, se han incluido los «neo banks» y los «challenger banks». Con sus propuestas de servicios financieros totalmente digitales han conseguido millones de clientes en decenas de países en tiempo récord sin comprar otras entidades. Tras el análisis de la entidad, valoran su impacto en el 1’25%, y señalan que sobre todo erosionará los márgenes de intereses y comisiones.
Por último, el informe analiza el impacto de las fintech, un ecosistema mundial de más de 15.000 startups y scaleups, que han recaudado más de 120.000 millones de dólares en los últimos siete años y que están impulsando la transformación digital del sector financiero. Para esta parte del estudio, se han estudiado casos de éxito en distintos ámbitos: plataformas de pagos, préstamos, wealthtech e insurtech. Estas compañías presentan más oportunidades que riesgos, y su efecto en el ROE bancario es el menor, con un 0’85%.