Abante, entidad independiente de asesoramiento financiero y gestión de patrimonios, acaba de cumplir 10 años desde su llegada a Sevilla, la primera ciudad de Andalucía donde se instaló en el año 2014. Desde entonces, la compañía ha continuado con su plan de expansión en la región y en el año 2018 sumó otra ciudad andaluza con la apertura de Málaga.
La oficina de Abante en Sevilla cuenta con un patrimonio de 300 millones de euros gestionados y asesorados de sus clientes, que son tanto inversores particulares como familias empresarias, grupos familiares e instituciones que necesitan una propuesta de asesoramiento global, especializada y a medida.
Una de las áreas que más ha crecido estos últimos años en la capital andaluza ha sido la relacionada con las empresas familiares, con las que la entidad trabaja en paralelo el asesoramiento de la familia -desde el punto de vista personal y patrimonial-, el asesoramiento corporativo -en función de las necesidades de negocio- y el asesoramiento inmobiliario, con un enfoque global y sin conflicto de intereses.
Manuel Díaz, director de Abante en Sevilla, que lleva al frente de la oficina en la región desde su inauguración, explica: “Nuestro crecimiento en Sevilla ha sido posible porque en estos diez años hemos sabido escuchar realmente a nuestros clientes, hemos comprendido que sus preocupaciones iban más allá de la parte financiera y les hemos ayudado a tomar buenas decisiones para que pudieran cumplir sus objetivos vitales y desarrollar todos sus proyectos”.
El modelo de asesoramiento de Abante pone en el centro de la conversación las necesidades, preocupaciones y objetivos de cada cliente. “En Abante diferenciamos el asesoramiento, que es el servicio que le damos a la persona, de la gestión, que es el servicio que le damos al dinero, y con esta máxima queremos seguir ayudando a los ahorradores, inversores y empresarios sevillanos. Creemos que el potencial de la provincia es enorme y apostamos firmemente por la región. Estamos viendo que cada vez hay más familias que, además de invertir, quieren organizar su patrimonio y la herencia para sus hijos. También vemos que hay muchos empresarios que después de vender sus empresas necesitan realizar un ejercicio de planificación financiera y tener una estrategia de inversión global que incluya tanto los activos cotizados tradicionales, como fondos de private equity y activos inmobiliarios”, añade Díaz.
En el año 2019, Abante ya reforzó su apuesta por Sevilla y cambió su oficina a Avenida de la Palmera, donde actualmente se encuentra. Un espacio de más de 340 metros cuadrados que ha permitido a la entidad seguir creciendo, reforzar el equipo y ofrecer el mejor servicio de asesoramiento financiero y patrimonial posible.
“Nuestra apuesta por Sevilla sigue siendo fuerte. Cuando llegamos a Andalucía, en el año 2014, tuvimos claro que tenía que ser aquí. Vimos que nuestro modelo de asesoramiento era cada vez más demandado y el cambio de oficina que hicimos hace cinco años nos permitió estar más cerca de nuestros clientes y dedicarles más tiempo de calidad”, explica Santiago Satrústegui, presidente de Abante.
El equipo de Abante en Sevilla está formado por siete profesionales, la mayoría de los cuales trabajan en el área comercial. Los consejeros financieros son los encargados de la relación diaria con los clientes y potenciales, trabajando de la mano del resto de especialistas del grupo, como los equipos de asesoramiento patrimonial, corporativo, inmobiliario, además del área de gestión y selección de fondos y del equipo de inversiones alternativas.
El aniversario en Sevilla se produce en un momento de fuerte crecimiento de la compañía a nivel nacional. Abante ha más que duplicado el patrimonio gestionado y asesorado en tres años hasta más de 12.000 millones de euros, cuenta con más de 11.800 clientes y tiene un equipo de casi 300 profesionales en nueve ciudades españolas.