En su revisión mensual de marzo, la Comisión Clasificadora del Riesgo (CCR) chilena publicó los últimos instrumentos de inversión extranjera aprobados. Un total de diez fondos de seis gestoras internacionales recibieron el visto bueno de la entidad reguladora.
La gestora que más aprobaciones consiguió fue Edmond de Rothschild AM, con tres aprobaciones de fondos registrados en Luxemburgo, el mismo número que en el mes anterior. El primero de ellos, el fondo Edmond de Rothschild Fund Emerging Bonds, se trata de una cartera gestionada de forma activa que invierte en todo el espectro de deuda emergente, tanto en divisa extranjera como en divisa local. La estrategia del fondo es totalmente flexible, permitiendo una cobertura total de la cartera y gestionar el nivel de liquidez de 0% al 100%. El segundo fondo es el Edmond de Rothschild Fund Europe Convertibles, fondo que tiene por objetivo obtener una rentabilidad estable a medio plazo invirtiendo en bonos convertibles europeos (80% de la cartera son emisiones en euros). Para conseguir un enfoque defensivo, el fondo utiliza emisiones equilibradas con alta liquidez, de las que al menos un 70% debe contar con calificación de grado de inversión. Y por último, el tercer fondo aprobado fue el Edmond de Rothschild Fund Global Convertibles, fondo que invierte al menos el 50% de la cartera en bonos convertibles globales con grado de inversión buscando siempre una elevada diversificación geográfica. La exposición a mercados emergentes está limitada al 40% y no existe riesgo de divisa pues el fondo está cubierto.
La gestora estadounidense Legg Mason consiguió aprobación para dos de sus fondos registrados en Irlanda. El primero de los fondos es el Legg Mason ClearBridge US Large Cap Growth, fondo que invierte al menos el 70% de sus activos en un grupo concentrado de acciones de empresas estadounidenses de grande capitalización, dominantes en sus respectivas industrias. Y el segundo es el Legg Mason QS MV European Equity Growth and Income Fund, fondo que invierte en acciones europeas, pudiendo invertir hasta un 20% en empresas de países europeos emergentes, buscando el crecimiento a largo plazo y favoreciendo aquellas empresas que hayan pagado dividendos atractivos y que se espere que vayan a seguir haciéndolo.
La gestora suiza Credit Suisse también consiguió aprobación de otros dos fondos, ambos invierten en renta fija de corta duración (emisiones de deuda corporativa de entre 1 y 5 años de vencimiento), con el objetivo de conseguir un pago de cupón estable. Se trata de los fondos CS (Lux) Corporate Short Duration EUR Bondy CS (Lux) Corporate Short Duration USD Bond, que además, utilizan instrumentos derivados para reducir el riesgo de interés de instrumentos de deuda con un mayor vencimiento.
Otras gestoras que consiguieron aprobar alguno de sus fondos fueron Julius Baer, Lazard Asset Management e Investec con dos fondos de renta variable, Julius Baer Multistock Emerging Equity Fund y Lazard European Smaller Companies; y uno de renta fija, Investec Global Strategy Fund Emerging Markets Local Currency Dynamic Debt Fund.