El Instituto BBVA de Pensiones hizo entrega a principios de marzo de los premios Longevia, cuyo objetivo es impulsar la investigación en torno a la longevidad y los sistemas de pensiones. Durante el evento, organizado junto al diario ABC, los premiados tuvieron ocasión de exponer el resultado de sus investigaciones y visibilizaron los retos que tiene ante sí la sociedad española ante la creciente esperanza de vida.
Abrió la jornada Luis Vadillo, director del Instituto BBVA de Pensiones, quien destacó que en España las pensiones se enfrentan a dos grandes retos. “Por un lado, la esperanza de vida a partir de los 65 años aumenta aproximadamente 16 meses cada diez años, pero la edad media de jubilación lo hace a un ritmo de seis meses por década. Y, por otro lado, la generación del baby boom se empezará a retirar a principios de la próxima década. Lo harán con una esperanza de vida mayor y sin una generación tan numerosa que la sustituya”, explicó. Luis Vadillo subrayó que el sistema público de pensiones debe adaptarse a los continuos cambios económicos sociales y demográficos que experimenta la sociedad.
“Debemos ser conscientes, además, de que las cotizaciones sociales ya nunca serán suficientes para mantener el actual sistema de reparto, dado que España es el país con menos proporción de jóvenes en el mundo, y que la diferencia entre prestaciones e ingresos por cotizaciones sociales se está financiando a través de otros ingresos del Estado que dependen totalmente del ciclo económico”, añadió.
Yolanda Gómez, subdirectora de ABC, moderó un debate en el que participaron José Antonio Herce, presidente del Foro de Expertos del Instituto BBVA de Pensiones, y los ganadores de los premios Longevia en las categorías de Derecho (Juli Ponce), Economía (María del Carmen Boado-Penas) y Sociología (Nuria Badenes).
José Antonio Herce subrayó que la longevidad tiene muchas caras. “Celebramos que vivimos cada vez más y mejor, pero la sociedad no es consciente de que la longevidad tiene muchas derivadas no tan positivas”, señaló. A su juicio, desde un punto de vista económico, la sociedad está desperdiciando la ganancia de vida de la población, porque esta se expresa a partir de edades no laborables, no productivas. Aboga, por ello, por retrasar la edad de jubilación.
En 2050 el peso de los mayores de 65 en la sociedad será del 34%
Nuria Badenes recordó que actualmente el peso de los mayores de 65 años en la sociedad es del 22% sobre el conjunto de la población, pero la previsión es que crezca hasta el 34% en 2050. A su juicio, supone un cambio muy importante en la sociedad que afectará tanto al ámbito de lo público como de lo privado. En el ámbito público, descenderá el gasto en educación (al ser una población con menos gente joven) y aumentará el gasto sanitario. Mientras, en el ámbito privado se abre todo un abanico de oportunidades económicas en torno a lo que se conoce como la ‘silver economy’. “En cuanto al sistema de pensiones, no será sostenible si no hacemos nada: o elevamos las cotizaciones o no elevamos las pensiones o retrasamos la edad de jubilación, o una combinación de las tres”, apuntó.
Maria del Carmen Boado-Penas abogó también por reformar el sistema de pensiones en España. “Se han tomado medidas, pero no son suficientes. Creemos que es necesario adoptar mecanismos de ajuste automático independientemente de las decisiones políticas”. La investigadora afirmó que la sociedad no aceptará ninguna reforma si no entiende el problema. Apostó, por ello, por la educación financiera. “Nosotros abogamos por un sistema público mayoritario que se complemente con un sistema de capitalización pequeño”.
Cómo incentivar el ahorro
Juli Ponce, ganador de la categoría de Derecho, centró su intervención en los sesgos cognitivos que dificultan que las personas tomen la decisión de ahorrar. “Debemos diseñar incentivos para incrementar el ahorro. Es aconsejable reforzar el segundo y tercer pilar del sistema de pensiones”, señaló, en referencia a los planes de pensiones de empleo y los planes individuales. Entre otras medidas, defendió la adopción de planes de empleo semiobligatorios, en los que el trabajador se une por defecto a un plan de pensiones y debe proactivamente darse de baja si así lo desea.
La jornada terminó con la intervención de Juan Carlos Hidalgo, director de la Territorial Centro de BBVA, quien recordó que el número de pensiones aumentará gradualmente desde los 9,6 millones actuales hasta unos 15 millones a mediados de siglo. “Es fundamental que cada uno de nosotros tomemos conciencia de esta situación para actuar, con independencia de las medidas que se adopten para garantizar la sostenibilidad del sistema público de pensiones”, indicó. “La educación financiera juega un papel clave para afrontar este reto. Existe una preocupación generalizada sobre que los ciudadanos no ahorran lo suficiente para su futura jubilación, y un importante factor detrás de este comportamiento es que hay un porcentaje de la población que no tiene conocimientos financieros suficientes”.