“Los millennials son una generación consciente de la importancia del retiro, pero no están haciendo nada por aportar a él y en sus inversiones, a pesar de su edad, son más conservadores”, menciona Francisco Villa, director comercial de soluciones institucionales de Principal. En un desayuno en la Ciudad de México el directivo comentó que se debe hacer un cambio en la forma que se realizan los planes de pensiones dirigidos a esta generación: “Si el mundo laboral se está adaptando a los jóvenes, por qué no lo haría el mundo de las inversiones”.
De acuerdo con el directivo, para atraer a esta generación se debe realizar un diseño de plan “que sea sencillo, con opciones automáticas y que puedan ser elegidas con un solo clic”. Además, considera muy importante el elegir “un buen administrador de activos; con soluciones diversificadas, así como asesoría especializada por medio de un coach financiero que se adecúe a las necesidades e intereses de cada cliente”.
Con esto en mente, la firma lanzó en 2010 un ETF enfocado a compañías inspiradas por las actividades de gasto y el estilo de vida de la generación Y: el GENY Principal Millennials Opportunity Index, que fue listado en México en febrero pasado
Citando a Richard Thaler, Villa mencionó que “nuestras percepciones y decisiones dependen del modo en qué se organizan ante nosotros las diferentes opciones” y que de alguna manera todos somos arquitectos de decisiones mediante la transmisión de conocimientos. En su opinión, los planes de pensiones basados en aportaciones automáticas aumentan mucho más las cantidades ahorradas, más allá de sólo dejarlo a la voluntad de los individuos, debido a “la desidia de no ir a hacer un trámite”.
En este contexto, algunos aspectos de la llamada “economía conductual” que se pueden aplicar al tema de pensiones son:
- Obligación de los patrones para patrocinar un plan de pensiones
- Afiliación automática (con opción de salida)
- Aportación mínima de arranque
- Auto-escalamiento de las aportaciones
- Incentivos fiscales
- Subsidios planos y/o contribuciones compartidas a cargo del gobierno y de las empresas patrocinadoras
- Campañas de educación financiera
“Pero lo más importante qué hay que transmitir a los jóvenes es que el tiempo es el activo más importante que tienen” ya que demorarse 10 años en empezar a ahorrar puede llegar a costarles una tercera parte del capital que podrían acumular, concluyó el directivo.