El año 2024 ha sido un periodo de relativa estabilidad en el ranking de pensiones y jubilaciones elaborado por Natixis, después del repunte de los mercados desarrollados registrado el año pasado.
Sin embargo, destaca el caso de México, país que registró un notable progreso en la edición 2024 del índice, al escalar del sitio 40 al 36. Lo anterior refleja una posición fortalecida en el índice de Finanzas en la Jubilación, con un 63%, y una mejora en el índice de Calidad de Vida, en el que se elevó a 64%.
La mejor posición en dicho índice, desde un 60% en 2023, destaca los esfuerzos continuos del país por reforzar el bienestar de sus jubilados. Estas mejoras colocan a México en una posición más competitiva, especialmente si se compara con los tres países a la cabeza del Subíndice, donde el promedio es 69.7% en Finanzas en la Jubilación y 86% en Calidad de Vida.
Y efectivamente, el avance de México en el índice de pensiones de Natixis y otros más, refleja ya los efectos de los cambios en el sistema de pensiones mexicano registrado en el sexenio.
Reforma de gran calado en el sistema de pensiones mexicano
La administración que está por concluir dentro de unos días, a cargo del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), llevó a cabo en 2021 la primera reforma de gran calado del Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), en 27 años, desde que inició el sistema de cuentas individuales en el SAR.
El gran cambio en dicha reforma consistió en impulsar de manera paulatina pero constante las tasas o cuotas de aportación, que se mantenían en un raquítico 6.5% del salario base de cotización de los trabajadores, hasta niveles de 15% hacia el año 2030, el mayor porcentaje de dicho ajuste recayó en la parte patronal (las cuotas de aportación al SAR en México son tripartitas: gobierno, trabajadores y patrones), ese fue quizás otro de los éxitos del gobierno, al no recargar en los trabajadores el aumento del ahorro para su retiro.
La reforma de gran calado permitirá en teoría elevar las pensiones de los trabajadores de un nivel promedio de 45% a uno de hasta 80% del salario registrado al momento de la jubilación, sin duda un cambio relevante. Pero el gobierno fue más allá y en una estrategia que sorprendió a todos fundó el año pasado un fondo especial para el retiro.
Fondo de Pensiones para el Bienestar, la otra parte de la estrategia
El Fondo de Pensiones para el Bienestar fue delineado e inició operaciones en unos cuántos meses; su aparición despertó inquietud en un inicio, sobre todo por lo que sería el origen de sus fuentes de financiamiento, concentrada en los recursos de los trabajadores con 70 años de edad y más, que no se habían jubilado, lo que representaba alrededor de 45,000 millones de pesos (2,308 millones de dólares), algo que fue calificado por lo especialistas como riesgoso e incluso ilegal.
Pero la propia ley del SAR contemplaba desde hace años la entrega de los recursos de los trabajadores que cuentan con 70 años de edad y más, para ser administrados en un fideicomiso en manos del Banco de México, cuya única obligación era y es solamente esa, la de administrar los recursos.
Así, el Fondo de Pensiones para el Bienestar inició operaciones en julio pasado; en realidad funciona más como un fondo complementario para las pensiones, y no tanto como un fondo de pensiones. Los trabajadores que ganan hasta 16,777 pesos mensuales ( 860.35 dólares), reciben en caso de pensionarse un monto que complementa lo que cobran como tasa de reemplazo, de modo que su pensión corresponde al 100 por ciento del salario reportado al momento de la jubilación.
Sin embargo, este fondo tiene algunas limitantes; la primera de ellas es el salario mencionado de 16,777 pesos, otra más consiste en que es exclusivo para los trabajadores de la ley 1997 y deja fuera a aquellos que cotizan bajo la ley 1973, que todavía son muchos millones de mexicanos. Una limitante adicional es lo ya señalado respecto a sus fuentes de financiamiento, según expertos este fondo tiene recursos para un periodo máximo de entre 5 y 10 años, por lo que en la administración que inicia en octubre deberán encontrar soluciones para incrementar sus recursos.
Lo que es un hecho es que en la administración que concluye el próximo 1 de octubre, fueron notorios los cambios al sistema de pensiones del país, algo no visto en décadas y que ya se refleja en los índices globales, aunque México todavía está muy lejos de los primeros sitios.
Los mejores del mundo
Los mejores sistemas de pensión del mundo según el índice de Natixis están encabezados por Suiza , con una puntuación perfecta en el indicador de desempleo, lo que refleja la asombrosa participación del sector obrero.
Islandia mantiene su 3er sitio por segundo año consecutivo a pesar de experimentar caídas en la mayoría de los subíndices. Notablemente, Islandia registró una baja en el de salud en siete posiciones (de los primeros 10 al 11ro) incluso después de un leve aumento en su puntuación.
Noruega ha visto una caída en el subíndice de Bienestar Material del primer lugar al 6to, y en el de Finanzas en la Jubilación, quedando fuera del top 10 en dicho subíndice y ocupando el 12do lugar debido a caídas en el indicador de presión fiscal, dependencia en la vejez y gobierno corporativo.
Luxemburgo sube cuatro puntos porcentuales para ganar el primer lugar en el subíndice de Salud, impulsado por un aumento en su puntuación de esperanza de vida, superando a Noruega que ocupaba anteriormente dicha posición.
Eslovenia y Bélgica suben cuatro puntos en el ranking, y Bélgica se eleva al 15to desde el 19no lugar, mientras que Eslovenia se queda fuera del top 10 en el lugar 11 desde un 15to.
Irlanda ocupa el primer lugar en el subíndice de Finanzas en la Jubilación, luego de mejorar su puntaje en un punto porcentual al 74% gracias a una estable reducción de la deuda gubernamental. Por su parte Reino Unido escala dos lugares en el índice de este año al 14to, debido a las ganancias en el subíndice de Salud, con puntuaciones sin cambio en el resto de los subíndices.