El gigante de gigantes se alejó levemente de América Latina durante la pandemia y diversificó su portafolio de acciones de la región. Y es que durante un año marcado por la volatilidad que la crisis sanitaria –y económica– del COVID-19 le inyectó a los mercados globales, el fondo de pensiones de Noruega, el vehículo soberano más grande del mundo, redujo su exposición a la región.
Datos de Norges Bank Investment Management (NBIM), la entidad estatal que administra la masiva cartera de cerca de 1,3 billones de dólares, el fondo terminó 2020 con un posicionamiento de 0,7% en renta variable latinoamericana. Esto representa una caída de 30 puntos base con respecto al 1% que tenían invertido en acciones de empresas regionales al finalizar 2019.
Lo mismo sucede con la cartera de renta fija del fondo soberano noruego, pasando de una exposición a bonos latinoamericanos de 0,8% en 2019 a 0,5% al cierre del año pasado.
Por otro lado, pese a la reducción en el posicionamiento, NBIM aprovechó el año pasado para diversificar su portafolio de acciones latinoamericanas. Entre ventas y compras de posiciones, el fondo noruego terminó 2020 con 17 empresas regionales más en su listado de inversiones.
Entre el inicio de enero y el fin de diciembre de 2020, se vieron una serie de entradas y salidas de acciones latinoamericanas del portafolio en todos los países en los que invierten, incluyendo algunos nombres grandes.
Cambios en la cartera
En activos brasileños, NBIM incorporó 22 papeles a la cartera, con apuestas en distintos sectores, incluyendo energía, banca, tecnología y telecomunicaciones. Algunos ejemplos son el operador de telefonía Oi –conocido anteriormente como Telemar–, la cadena de productos de mascotas Pet Center, la petrolera Petro Rio y el banco Santander Brasil.
Por el contrario, el fondo noruego sacó ocho compañías brasileñas de la cartera de renta variable durante el año, destacando las exclusiones de la gigante energética Eletrobras y la minera Vale. Ambas desinversiones se devieron a motivos éticos, según explicó el fondo en su momento a través de un comunicado. En el caso de la primera, advirtieron de posibles riesgos de violación a los derechos humanos en su proyecto de central en Belo Monte, mientras que la segunda se basó en el daño ambiental provocado por los accidentes en represas que protagonizó en los últimos años.
En el caso de México, dentro de las 11 incorporaciones se incluyen los títulos de la Bolsa Mexicana de Valores, el holding alimentario Grupo Bimbo y el retailer Walmart México, mientras que las ocho desinversiones del período incluyen Banco del Bajio y la embotelladora Coca-Cola Femsa.
En la región andina, los otros tres países latinoamericanos en los que el masivo fondo noruego tiene posiciones, también se vieron rebarajes de posiciones, con la entrada de seis títulos chilenos –Aguas Andinas, CSAV, Coca-Cola Embonor, Quiñenco, Ripley y Sonda– y la vendedora de bienes de capital peruana Ferreycorp.
En la otra vereda, salieron del portafolio las chilenas IAM (matriz de Aguas Andinas), la operadora de centros comerciales Parque Arauco y la aerolínea Latam Airlines Group. Esta última fue extraída de los mayores indicadores bursátiles globales y nacionales después de que iniciaran un proceso de reorganización judicial en EE.UU., en un proceso conocido como “Chapter 11”.
En Colombia, se excluyó a Almacenes Éxito, Cementos Argos y Grupo Energía Bogotá, y en Perú se cerraron las posiciones en Austral Group y La Positiva Seguros y Reaseguros.
Estrategia de inversión
NBIM funciona bajo un mandato del gobierno noruego que establece los lineamientos que deberá seguir la estrategia de inversión del fondo, que incluye criterios de sostenibilidad y ética empresarial.
“Las inversiones en renta variable y renta fija del fondo reflejan fuertemente los índices referentes que define el ministerio de Finanzas”, explica una vocera de NBIM.
En el caso de las apuestas accionarias, el benchmark está basado en el indicador FTSE Global All Cap, que tenía 8.922 compañías listadas al cierre de 2020, mientras que el posicionamiento en bonos está basado en índices Bloomberg Barclays, que contiene 15.506 papeles de deuda de 1.721 emisores a nivel global.
Según comentan fuentes de mercado conocedoras del asunto, el vehículo soberano no entregó instrucciones sobre cambios de estrategia en la región durante el período.
El vehículo soberano noruego empezó a funcionar en 1996 y terminó el año pasado con cerca de 1,3 billones de dólares bajo administración, los que están actualmente invertidos en 9.123 empresas en 73 países distintos.