KPMG ha publicado la III edición del Estudio de mercado sobre la situación de las pensiones en España. El informe ha sido elaborado por expertos de KPMG en el ámbito de la previsión social y está basado en las respuestas de 349 empresas. Del total, solo un 27,5% ha reportado que cuenta con al menos un sistema de jubilación colectivo para su plantilla, lo que, según los autores del informe, refleja el escaso desarrollo de los sistemas complementarios en España.
De las empresas que cuentan con plan de previsión, un 39,6% ofrece más de un plan a sus empleados, siendo el sector financiero y el energético los que gozan del mayor grado de desarrollo en la implementación de sistemas de previsión, y el sector de transporte y logística y la industria los que menos.
Casi el 80% de estos planes son de aportación definida, un 11% mixtos y un 10% de prestación definida. En cuanto al tipo de vehículo, el 46% opta por planes de empleo, un 30% por seguros colectivos de vida, y ya en menor medida por un plan de previsión social empresarial (14%).
Lo más habitual son fórmulas de aportación consistentes en un porcentaje fijo sobre el salario pensionable, constituido en la mayoría de los casos como el salario fijo bruto. La media de la aportación es de un 4,1% del salario. Por otro lado, el 25% de las empresas con planes de aportación definida o mixtos dirigidos a la totalidad de la plantilla exigen aportación por parte del empleado para tener derecho a la aportación de la empresa. En estos casos la más habitual es que la empresa duplique la aportación obligatoria del empleado (34%), un 29% opta por igualarla y solo un 10% la triplica. Respecto al porcentaje de salario que los empleados estarían dispuestos a destinar, el 69% de los empleados encuestados aportaría un 5% de su salario, mientras que solo un 28% de las empresas aportarían tal porcentaje.
Asimismo, la preocupación de los trabajadores y las empresas por la jubilación ha aumentado. Ante la pregunta de si es importante la planificación de la jubilación en su empresa, un 37% ha contestado que sí lo perciben como un tema prioritario a día de hoy, mientras que este porcentaje pasa a ser del 74% cuando se plantea para un horizonte temporal de los próximos 10 años. En relación con la percepción para los empleados, los porcentajes aumentan hasta un 52% y 89% respectivamente.
Solo el 6% de las empresas implantaría un sistema de previsión
A pesar de la alta valoración por parte de los empleados y la voluntad de las empresas de integrar un plan en su empresa, el estudio desprende que solo el 6% de los participantes que no cuenta con un sistema de previsión tiene prevista la implantación de uno.
Según el informe, uno de los argumentos más habituales para no implantar planes de previsión es que suponen un compromiso a largo plazo para las empresas con un alto coste que a futuro puede ser difícil de mantener. Una posible solución que plantean desde KPMG sería implementar planes vinculados a los resultados de la compañía. “Este tipo de planes permiten a las empresas reducir los costes en momentos difíciles y por otra parte motivar a los empleados para la consecución de unos mejores resultados ya que repercute en sus aportaciones al plan de previsión”, añaden desde la entidad. Por otro lado, para aquellas entidades que deciden no implantar un plan de previsión por su elevado coste, la posible solución que plantea la entidad sería establecer un plan de ahorro a través de la retribución flexible.
“La falta de información en torno al sistema público generan limitaciones en la adecuada planificación de la jubilación”
La confianza en el sistema público decrece y la opinión del mercado es que las pensiones que otorgará el estado no serán suficientes. Un 86% de la muestra considera que será necesario el ahorro para complementar la pensión pública para alcanzar un nivel de recursos dignos a la jubilación.
Sin embargo, existe un alto grado de desconocimiento sobre aspectos que determinan las pensiones públicas, lo que, según el informe, dificulta la planificación y el ahorro de los trabajadores. Por ejemplo, un 31% de los encuestados piensa que recibirá pensión pública habiendo cotizado menos de 15 años (es necesario acreditar un periodo mínimo de 15 años para acceder al cobro de la pensión). Respecto al sistema privado de pensiones, el 81% desconoce la cuantía que debe destinar al ahorro para alcanzar la pensión que desean percibir llegada la jubilación y casi el 70% desconoce el vehículo más conveniente para financiar la pensión.