La Seguridad Social ha destinado en el mes de mayo 9.852,78 millones de euros al pago de pensiones contributivas, lo que supone un incremento del 2,52% respecto al mismo mes del año pasado, pero un retroceso que roza el 3% respecto al mes anterior. Estas cifras demuestran que, por primera vez en la historia, se ha producido un retroceso mensual de la serie histórica, según ha anunciado el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
38.508 pensiones menos
El conjunto del sistema incluyó un total de 9.754.137 pensiones contributivas (38.508 menos que el mes anterior), un 0,48% más que el año pasado. El 62,26%, en concreto 6.073.499, fueron por jubilación; 2.343.975 correspondieron a prestaciones de viudedad; 953.905 a incapacidad permanente; 339.814 a orfandad y 42.944 fueron pensiones a favor de familiares.
Más de dos tercios de la nómina se destinaron al abono de las pensiones de jubilación, cuyo montante ascendió a 7.049,44 millones de euros. Esta cuantía creció un 3,02% en los últimos doce meses. A las pensiones de viudedad, se destinaron 1.698,64 millones de euros, un 1,28% más que hace un año. El crecimiento de la nómina de las prestaciones por incapacidad permanente fue del 1,15%, hasta situarse en 940.17 millones. A prestaciones de orfandad, por su parte, se dedicaron 139.1 millones (1,39%), y a las prestaciones a favor de familiares, 25,3 millones de euros, un 3,62% más.
La pensión media es de 1.010,11 euros mensuales, lo que ha supuesto un aumento interanual del 2,03%. La pensión media de jubilación ascendió a 1.160,6 euros, un 2,02% más respecto al año pasado. Por su parte, la pensión media de viudedad fue de 724,6 euros al mes.
En cuanto a las nuevas altas de pensiones, su cuantía fue mayor que la media del Sistema y superior en un 9,8% al importe de las nuevas pensiones en 2019. En el mes de abril, última fecha disponible, las pensiones correspondientes a las nuevas altas de jubilación fueron de 1.472,49 euros al mes. Las del Régimen General llegaron a 1.616,33 euros/mes.
La influencia de la pandemia en el sistema
Según los datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social, el número de altas de pensión registradas en abril (31.232 pensiones) ha descendido en un 32,2% respecto al mismo mes del año pasado (46.051) y un 13,9% si se compara con el mes anterior (36.274). Según explican desde el Ministerio, en estas estadísticas se observa, acentuándose la tendencia del mes anterior, un descenso en el número de pensiones y de pensionistas. «En parte, esto se debe al menor número de altas en el Sistema debido al cierre de oficinas y a la situación de confinamiento», sostienen.
En lo que va de año, se ha registrado una reducción del 33,8% en el número de expedientes iniciados en comparación con el mismo periodo del año pasado (según datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social). Por ejemplo, en marzo y abril se han iniciado 32.512 expedientes por jubilación, frente a los 49.798 de un año antes.
Pero, según comunican desde el Ministerio, «también hay que tener en cuenta cómo ha influido la pandemia de COVID-19 en términos de mortandad sobre el conjunto de la población y, en mayor medida, sobre el colectivo de las personas de mayor edad». Si se considera el acumulado anual desde enero hasta el inicio de mayo de 2020 han causado alta 157.896 nuevas pensiones (lo que supone un descenso del 22,1% respecto al mismo periodo del año anterior), y han causado baja 205.638 pensiones (un 17,5% más que el año anterior).
Debido al estado de alarma los ciudadanos deben presentar las solicitudes de prestaciones y realizar el resto de trámites exclusivamente por vía telemática o telefónica, lo que, según el Ministerio, ha motivado que una parte de los ciudadanos opten por retrasar las gestiones. No obstante, se ha habilitado un formulario para que quienes no disponen de certificado digital puedan realizar estos trámites.
Por otro lado, el número de pensiones de las clases pasivas en vigor en el mes de abril ha sido de 636.302, lo que ha situado la nómina en ese periodo en 1.151,15 millones de euros.