China se enfrenta a graves problemas en materia de pensiones y jubilación. Es bien sabido que la enorme población china, que envejece rápidamente, se enfrentará a una escasez de cobertura de pensiones que parece que se agravará en los próximos años. No hay una solución rápida para que las pensiones estatales no cubran las crecientes necesidades de jubilación, pero los responsables políticos consideran que el fomento de los planes privados de ahorro para la jubilación es un medio clave para cerrar la brecha.
En este sentido, según señalan desde Fidelity International, se observan algunos signos alentadores, sobre todo en lo que respecta a la concienciación generalizada en China continental sobre la importancia del ahorro y de la creación de un fondo de reserva para los días de lluvia. Según los resultados de una nueva encuesta de Fidelity International, China obtiene una puntuación más alta que la mayoría de sus homólogos mundiales en lo que respecta al bienestar financiero general de sus ciudadanos, una base que sustentará el desarrollo de las pensiones privadas o del tercer pilar.
En la encuesta sobre bienestar financiero, realizada a 17.000 personas de Canadá, China, Alemania, Hong Kong, Japón y el Reino Unido, los encuestados chinos urbanos obtuvieron la mejor puntuación media, con 71 puntos sobre 100. La encuesta midió la salud financiera en una serie de factores como el ahorro, el presupuesto, el colchón para emergencias y la deuda.
La alta conciencia de ahorro y los fondos de emergencia adecuados diferencian a China de sus pares mundiales, aunque los encuestados chinos quedaron ligeramente rezagados en el uso prudente de la deuda. China obtuvo 18 de 25 puntos tanto en ahorro como en protección, aventajando a otros países por un amplio margen.
La tasa de ahorro personal de China se ha mantenido por encima del 30% durante años, en comparación con los niveles de un solo dígito de la mayoría de los países occidentales, según las cifras oficiales. La tasa de Estados Unidos ha fluctuado por debajo del 10% durante la mayor parte de la última década, antes de subir a dos dígitos en la crisis del COVID-19.
La encuesta también revela que los chinos continentales rara vez gastan más de lo que pueden permitirse y solo el 4% de los encuestados afirma gastar por encima de sus posibilidades. Precavidos ante el futuro, los ciudadanos chinos tienen fondos de emergencia que cubren una media de 5,5 meses de gastos.
Crece la concienciación acerca de la importancia del ahorro
La concienciación del público sobre la necesidad de ahorrar para la jubilación ha aumentado aún más y en todos los grupos demográficos de China. A principios de este año, la tercera Encuesta sobre la Preparación para la Jubilación en China, realizada por Fidelity International en colaboración con Alipay Wealth Management Platform, descubrió que más de la mitad de los encuestados millennials (de entre 18 y 34 años) y casi el 60% de los mayores de 34 años habían empezado a prepararse para su futuro financiero. Esto representa una notable mejora respecto a 2018, cuando solo el 44% de los millennials y la mitad de los no millennials había empezado a ahorrar.
Los cambios demográficos en China significan que las personas tendrán que ahorrar más si quieren disfrutar de la misma o mejor calidad de vida en sus últimos años que las generaciones anteriores. Los responsables políticos chinos abordan cada vez más el tema del déficit de pensiones en público, aunque las estimaciones sobre la magnitud de la brecha varían entre los investigadores. Los ciudadanos chinos de 65 años o más han aumentado más del 50% en los últimos 10 años, hasta alcanzar unos 180 millones, lo que supone una cuarta parte de la población mundial en ese grupo de edad. Según una previsión oficial, la cifra seguirá aumentando hasta los 310 millones en 2035.
Los principales responsables políticos han subrayado recientemente la urgente necesidad de que China desarrolle más ahorro privado para la jubilación y pensión. Esto coincide con el impulso de China para abrir sus fronteras financieras e invitar a una mayor participación extranjera en el mercado. Aunque todavía es incipiente, el potencial de crecimiento de las pensiones privadas en China es enorme: en Estados Unidos, por ejemplo, los activos de pensiones del tercer pilar ascienden a 11 billones de dólares. En comparación, las pensiones estatales chinas o del primer pilar cuentan con unos 6,3 billones de renminbi (960.000 millones de dólares) en activos, lo que supone aproximadamente un tercio del tamaño del mercado del primer pilar estadounidense.
La encuesta sobre el bienestar reveló un fuerte sentimiento de ahorro para los días de lluvia entre los residentes chinos. A pesar de los retos demográficos, China puede aprovechar la conciencia de planificación y la sólida salud financiera personal, al diseñar un sistema privado de pensiones con el potencial de convertirse en uno de los mayores del mundo.