Desde 2020, la mayoría de los países continúa lidiando con los efectos sociales, económicos y financieros del envejecimiento de la población que se han visto acentuados por la pandemia de COVID-19. El entorno económico actual, con un crecimiento salarial reducido, una inflación creciente y una reducción de los rendimientos de las inversiones en muchas clases de activos, representan un desafío para los sistemas de pensiones de todo el mundo, según afirma este año Mercer CFA Institute Global Pension Index (MCGPI).
El índice compara 44 sistemas de jubilación; este año ha incorporado Portugal, y representa un 65% del total mundial. El estudio establece un ranking global, utilizando más de 50 indicadores para asignar un valor a cada uno de los tres subíndices según su peso: suficiencia (40%), sostenibilidad (35%) e integridad (25%). Es un proyecto de investigación colaborativo entre Mercer, el Centro de Estudios Financieros Monash (MCFS) y CFA Institute, la asociación global de profesionales de la inversión.
España desciende 4 puestos con respecto a 2021 pasando de ocupar la posición 22 del ranking al 26. En el caso del sistema de jubilación español, el principal desafío continúa siendo la sostenibilidad del sistema público a medio y largo plazo. Este subíndice mejora ligeramente de 28,1 a 28,7 puntos, aunque sigue siendo uno de los más bajos de los 44 países analizados. También mejoran los otros dos subíndices, el de integridad y el de suficiencia elevando el índice general en tres puntos, del 58,6 en 2021 a 61,8 en 2022. Un incremento que sin embargo no ha supuesto una mejora de la posición de España en el ranking debido a que la media general de todos los países también se ha elevado.
El índice cataloga a España como una C+, un sistema bueno con carencias y riesgos que deben ser abordados para que su eficacia y su sostenibilidad a largo plazo no sean cuestionadas. Para mejorar el valor índice global del sistema español el estudio recomienda: proporcionar un mayor apoyo a los individuos con bajo nivel adquisitivo y de edad más avanzada, aumentar la cobertura de los trabajadores en los planes de pensiones a través de la afiliación o la inscripción automática, e incrementar la tasa de participación de la población activa en las edades más avanzadas.
Según Miguel Ángel Menéndez, director de desarrollo del área de Wealth de Mercer España: “La reciente aprobación de la Ley 12/2022 de 30 de junio de regulación para el impulso de los planes de pensiones de empleo favorecerá la puesta en marcha de planes simplificados, especialmente enfocados en la gente joven, las pequeñas empresas y los trabajadores autónomos. Esta Ley coincide con la segunda de las recomendaciones del índice de creación de planes de adscripción automática”.
Islandia, Países Bajos y Dinamarca lideran el ranking
En su 14º edición, el Mercer CFA Institute Global Index vuelve a situar a Islandia a la cabeza del ranking con un índice de 84,7 puntos, seguida por Países Bajos (84,6) y Dinamarca (82,0). Tailandia obtuvo el valor más bajo del índice (41,7). México es el país que más avanza con respecto a 2021 gracias a la reforma de las pensiones.
Para cada subíndice, los sistemas con los valores más altos fueron Islandia para la suficiencia (85,8) y la sostenibilidad (83,8), y Finlandia para la integridad (93,3). La puntuación más baja corresponde a India para la suficiencia (37,6), Austria para la sostenibilidad (22,7) y Filipinas para la integridad (30,0).
“El actual entorno mundial presenta cuestiones preocupantes como el desarrollo de la guerra, tasas de inflación aún no controladas, o riesgos en el suministro de energía que están ejerciendo una presión inusual sobre los ahorros a largo plazo de las personas para su jubilación. Nunca antes había sido tan importante mantener competitivo el ahorro de las personas. Corresponde a los legisladores y a los diferentes actores de la industria examinar las fortalezas y debilidades de los sistemas de pensiones, y tomar las medidas necesarias para brindar mejores beneficios de jubilación a todas las personas, y así cumplir la promesa de una jubilación segura”, argumenta José Luis De Mora, CFA, Presidente de CFA Society Spain.
Por último, en esta edición, el MCGPI destaca el mayor número de empleados que se aleja de los planes de pensión de prestación definida (PD) hacia los planes de aportación definida (AD), en los que los individuos tienen una mayor responsabilidad financiera. A diferencia de los planes de PD, en los que un individuo recibe pagos regulares de ingresos de por vida al jubilarse, los planes de AD suelen ofrecer a los individuos una prestación a tanto alzado en el momento de la jubilación. Además, muchos gobiernos están considerando reducir su nivel de apoyo financiero durante la jubilación para garantizar la sostenibilidad financiera del país a largo plazo. El resultado es que muchos individuos ya no podrán contar con un apoyo financiero significativo de sus anteriores empleadores y/o del gobierno durante sus años de jubilación.