El consenso del mercado en Chile es que el cuarto retiro parcial de fondos previsionales no va a seguir los pasos de las tres ventanas de enajenación de 10% de los ahorros aprobados desde junio del año pasado. Sin embargo, las ansiedades en torno al proceso persisten, con foco en el impacto en el mercado y del futuro del sistema de pensiones en el país.
Esta semana será clave para la iniciativa del cuarto retiro, ya que el miércoles el proyecto de ley pasará a la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputadas y Diputados de Chile, donde se discutirá si pasa a votación en la instancia legislativa.
En el mercado ven como improbable que la iniciativa sea aprobada. Analizando las tasas de interés y el tipo de cambio en el país, se observa que los inversionistas están empezando a internalizar que el proyecto no llegará a puerto, según explica Luis Felipe Alarcón, gerente de Estudios de Inversiones de Euroamerica.
Después de pasar un par de semanas cotizando sobre los 780 pesos chilenos, el tipo de cambio local cayó hoy un 1%, a su menor valor desde el 12 de agosto, mientras que las tasas de bonos soberanos en pesos y en UF han caído en la última semana.
Alarcón ve como probable que la iniciativa sea aprobada por la Comisión y que pase a votación. E incluso si pasa el cedazo de la Cámara Baja, el ejecutivo anticipa que en el Senado se frene la iniciativa.
Sin embargo, las preocupaciones persisten, con los inversionistas preguntándose qué sucederá con los mercados locales, la industria y la misma continuidad del sistema de pensiones en el país.
Las preocupaciones del mercado
Una de las posibilidades es que el proyecto se caiga en el Congreso, pero que después reflote en el futuro, según explica la académica del ESE Business School de la Universidad de Los Andes, Cecilia Cifuentes.
“Probablemente la situación el próximo año va a ser más compleja, y no descartaría que vuelvan a surgir estos afanes populistas ahora en el Congreso”, explica la economista. Esto porque eventualmente el gobierno tendrá que retirar los apoyos de liquidez a las familias y la economía desacelerará su crecimiento, señala, por lo que “las empresas y las familias van a ver una situación bastante más restrictiva el próximo año”.
Además, desde el mercado destacan que la situación que se ha dado con los sucesivos retiros de fondos previsionales pone en duda la continuidad del modelo de pensiones en Chile como se le conoce.
En ese caso, este proceso podría tener un impacto relevante en el mercado de capitales chileno, según comenta Alarcón. “Un mercado de capitales robusto y líquido es fundamental para el crecimiento económico. Si liquidas al principal actor, que son las AFP, y no lo reemplazas con algo equivalente, eso podría transformarse en la lápida del mercado de capitales”, señala.
En ese caso, el ejecutivo de Euroamerica advierte que el mercado financiero chileno, uno de los más profundos de América Latina, podría evolucionar en algo similar a lo observado en Argentina, donde las inversiones se concentran en el money market y la deuda de corto plazo.
Por su parte, Cifuentes indica que las medidas que se han tomado durante la pandemia de COVID-19 han tenido un impacto en los fundamentos de la economía local. “Se destruyeron dos pilares fundamentales del desarrollo económico: el mercado de capitales, que se sustentan en el modelo de capitalización, y la sostenibilidad fiscal. En esos dos pilares, el daño es enorme, y esto lo vamos a pagar por años”, señala la académica.
Los retiros anteriores
A más de un año de que iniciara el primer retiro de fondos previsionales, la distribución de capital desde los fondos de pensiones hacia los hogares chilenos ha sido relevante.
Hasta el viernes 27 de agosto (último dato disponible), los tres retiros parciales de fondos previsionales sumaban los 48.765 millones de dólares en total, según informó la Superintendencia de Pensiones esta semana.
La primera ventana de rescates –la única que ya se cerró– ha beneficiado a cerca de 11 millones de afiliados al sistema, con un pago total de 19.815 millones de dólares. El segundo proceso, por su parte, ha repartido 15.959 millones de dólares entre 8,9 millones de persona; y el tercero, 12.991 millones de dólares, entregados a 6,9 millones de personas.