Después de la aprobación en las dos cámaras del Congreso la semana pasada y descartado un veto presidencial, se acelera el retiro del 10% de los fondos chilenos, por una sola vez y en razón del coronavirus. La ley será publicada en breve en el diario oficial y a partir del jueves empezará la operación organizativa que pondrá a prueba a las AFPs.
Según una encuesta de la firma Cadem realizada el pasado domingo, el 92% de los interrogados aprueba el cambio de la normativa y el 86% declaró que sacará los fondos desde las AFPs.
En una entrevista de televisión, el presidente de la Asociación de AFP de Chile, Fernando Larraín, reconoció que a partir del jueves los fondos de pensión se enfrentan a una tarea titánica que “va a requerir que en 30 días haya probablemente más de 22 millones de transacciones, algo que nunca hemos visto en Chile”.
Las AFPs han empezado a mandar información a sus afiliados con informaciones básicas. La mayoría de las solicitudes se podrán hacer online desde las páginas web de los diferentes fondos de pensión.
Según la Superintendencia de Pensiones las AFPs tendrían que entregar unos 20.000 millones de dólares en caso de que todas las personas afiliadas retiren el máximo autorizado en el proyecto actual.
De los 164.069.831 millones de pesos (más de 200.000 millones de dólares) que administran las AFP a junio, un 5,3% está invertido en acciones locales, un 48,7% en bonos nacionales, y un 45% está en el extranjero.
Analizando la situación por cada AFP, un estudio de Ciedess muestra que Planvital es la que tendría que liquidar el mayor porcentaje del total de su cartera, ya que en caso de que todos retiren el máximo posible de sus fondos, se quedaría con el 75,1% de los recursos que tiene actualmente. En el caso de UNO es el 76,6%, y le sigue Modelo con el 79,3%. Luego se ubica Provida con el 87,4%, luego Capital con el 89,7%, Habitat con 90,7%, y Cuprum con 93%.