El coro de voces técnicas que critican el proyecto que busca abrir una cuarta ventana de rescates de fondos de pensiones en Chile es fuerte, pero la presión popular contra las AFP también. Y en ese juego, mientras el proyecto se discute en la Comisión de Constitución del Senado, los inversionistas están castigando duramente a los activos locales, anticipando el golpe a la economía que provocaría una eventual aprobación de la iniciativa.
El proyecto vivió una jornada de discusión este miércoles, con presentaciones del ministro de Hacienda del país, Rodrigo Cerda, y el superintendente de Pensiones, Osvaldo Macías, quienes delinearon el impacto que la medida tendría en la economía.
Una de las principales preocupaciones es el aumento que han experimentado los precios al consumidor, que ha provocado un aceleramiento en el proceso de normalización monetaria en Chile.
Pese a que mientras se tramitaba en la Cámara de Diputadas y Diputados había una percepción de que el proyecto se frenaría en el Congreso, el creciente apoyo a la iniciativa –como sucedió con el senador Juan Pablo Letelier– ha causado estragos en los activos financieros chilenos.
El tipo de cambio muestra el nerviosismo del mercado. El dólar en Chile ronda los 813 pesos chilenos al cierre de esta nota, su mayor valor desde mediados del año pasado, y en la jornada anterior marcó un peak intradiario sobre los 818 pesos. Esto arroja una subida de más de 14% en lo que va del año.
La historia es similar en los activos de renta fija y renta variable. Durante 2021, el índice bursátil referencial S&P IPSA ha perdido más de 8% de su valor, pese a la recuperación económica apoyada por la exitosa campaña de vacunación contra el COVID-19, mientras que las tasas de interés de los bonos soberanos a 10 años han subido 335 puntos base para los papeles nominales y 286 puntos base para los títulos indexados a la inflación.
La próxima semana se reanuda la discusión del proyecto en el Senado, con presentaciones de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) y el Banco Central. En la Cámara Baja, la iniciativa pasó con 94 votos a favor, incluyendo los de 18 parlamentarios oficialistas. Ahora, para pasar la etapa del Senado, la iniciativa necesita 26 votos.
Impacto económico
El fuerte apoyo social al cuarto retiro de fondos previsionales –apoyado por años de crecientes críticas al modelo de pensiones chileno, en general, y las AFP, en particular– tiene a algunos parlamentarios indecisos, pero la visión técnica es relativamente transversal. El mensaje común es: un cuarto retiro tendría un efecto negativo en la economía local.
“De aprobarse un cuarto retiro, estarán nuevamente en forma simultánea tres procesos de retiros de fondos, cuyos efectos preocupan, por el peligro de disparar la inflación, elevar las tasas de interés de la economía, en especial de los créditos para la vivienda, y por la caída de los fondos de pensiones más conservadores”, señaló en un informe la Asociación de Administradoras de Fondos de Pensiones (AAFP) local.
En esa línea, la entidad gremial señala que la iniciativa no es una “política pública social”, ya que “se utiliza el dinero que los propios trabajadores ahorran para su pensión para destinarlo a mitigar efectos de la crisis económica derivada de la pandemia”, agregaron.
Desde el banco de inversiones Julius Baer concuerdan con el diagnóstico. Según señalaron en un reporte reciente, después de que los tres retiros anteriores sumaran (de momento) la distribución de 49.000 millones de dólares en capital a los hogares, este nuevo retiro inyectaría unos 20.000 millones de dólares adicionales, levantando los precios al consumidor aún más.
“Esperamos que el proyecto de ley afecte la economía, ya que es probable que los chilenos liquiden aún más los fondos destinados a la jubilación. En este contexto, mantenemos una calificación Neutral para la renta variable chilena en el período previo a las elecciones de noviembre”, indicó Leonardo Pellandini, de Equity Strategy Research de la firma de capitales europeos.
El aumento de las tasas también ha puesto los costos de financiamiento en la mira. Si bien las tasas de los créditos hipotecarios han tenido un alza acotada en los últimos meses, promediando 3,10% anual en agosto de este año (último dato disponible), según datos de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (Abif), la aprobación de la nueva ventana de rescates podría empujarlas al alza con más fuerza.
“Un eventual cuarto retiro de fondos de pensiones generaría una presión adicional al alza en las tasas de interés, que de materializarse podría impactar aún más las tasas hipotecarias, disminuyendo el dinamismo de esta cartera”, indicó la entidad en un informe reciente.