En España existe una fuerte cultura de propiedad de la vivienda frente a otros países europeos, una realidad aún más acusada entre los mayores. Concretamente, el 90% de los mayores de 65 años tienen vivienda en propiedad, según informa Marta Gómez, directora de Comunicación y Relación con Inversores de Almagro Capital.
Una tendencia que se explica, según Gómez, en parte por el bajo desarrollo de un mercado de alquiler especializado y en manos de operadores profesionales. “El mercado del alquiler sigue mostrando una fuerte atomización y un bajo porcentaje de profesionalización”, valora.
El porcentaje elevado de propiedad contrasta con el dato de que el 65% de los mayores de 65 tiene ingresos inferiores a 1.300 euros al mes. Además, debemos tener en cuenta los retos a los que se enfrenta el sistema de pensiones y la posibilidad de contar con un ahorro complementario en caso de que la pensión pública disminuya. A raíz de este problema han surgido nuevos productos que permiten complementar el ahorro para la jubilación monetizando la vivienda. Dos de los más populares son la hipoteca inversa y la vivienda inversa.
Tal y como explica Gómez, la hipoteca inversa es un préstamo hipotecario con primera garantía sobre la vivienda, el propietario puede recibir dinero en efectivo en el momento de la firma y/o cuotas mensuales. «Se aplica un tipo de interés alto que se capitaliza a lo largo de la vida del préstamo. A vencimiento/fallecimiento del propietario es el heredero quién tiene que hacer frente al pago de la deuda para lo que tiene 12 meses tras fallecimiento. De no liquidar la deuda la vivienda pasa a propiedad del banco que otorgó la hipoteca», explica la experta.
Por otro lado, la vivienda inversa es un modelo de compraventa de la vivienda con alquiler vitalicio. El propietario vende la vivienda y firma un contrato de alquiler vitalicio. Es totalmente flexible ya que se negocia con cada propietario. Se calcula la esperanza de vida del propietario y se retiene el montante necesario para hacer frente al alquiler durante ese espacio de tiempo.
Si el propietario abandona la vivienda antes se devuelve el montante retenido no consumido a él o a sus herederos y si sobrevive a dicha esperanza de vida se le aplica una renta superbonificada que coincide con el pago de la comunidad de la vivienda. “Es totalmente flexible puesto que el vendedor puede abandonar la vivienda cuando decida sin que ello conlleve ningún tipo de penalización”, explica.
En España, Almagro Capital es el único operador que hace vivienda inversa en España, según asegura Marta Gómez. Este vehículo, va dirigido a propietarios mayores de 65 años que quieran monetizar sus ahorros inmobiliarios y permanecer en su vivienda. “Es una opción atractiva porque no te obliga a tomar ninguna decisión vital en un momento puntual, vendes ahora, permaneces como inquilino de forma vitalicia y abandonas la vivienda en el momento que consideres oportuno sin ningún tipo de penalización económica”, apunta la experta.
Respecto al futuro de este tipo de soluciones, la experta de Almagro Capital señala que España es un mercado con más de 9Mn de personas mayores de 65 años y se estima que en 2040 se alcancen los 14mn (+28,8% de crecimiento). “La esperanza de vida está creciendo y el 85% del ahorro está en la vivienda a día de hoy”, añade.