El último Barómetro de Pensiones de Fondos Directo destaca que las gestoras de pensiones, por término medio, comenzaron el año aumentando sus posiciones de liquidez de forma previa a que se desatara la pandemia. Una decisión que Juan Manuel Vicente Casadevall, socio de Fondos Directo, considera “acertada”. Esta encuesta, que cuenta con la colaboración de AXA IM y Amundi AM, refleja la asignación de activos e inversiones de las pensiones privadas en España correspondiente al primer trimestre de 2020, y se completó por parte de las gestoras de pensiones a finales de enero y durante la primera quincena de febrero, antes de la expansión mundial del COVID-19.
Según los datos recogidos, la asignación agregada media a liquidez subió hasta el 7,2% desde el 5,9% anterior o el 4,3% del primer trimestre del año pasado, uno de los niveles más altos registrados en el barómetro y sólo superado recientemente a finales del 2018, durante la última corrección severa de los activos de riesgo. En este sentido, Eva Valero, directora de Pensiones de Caser, explica que “es cierto que después de las buenas rentabilidades obtenidas en 2019, nuestras carteras tenían un sesgo más líquido y conservador, dentro de lo que se recoge en la política de inversión de cada fondo de pensiones, con uno de los objetivos de preservar capital”.
Según explica Juan Manuel Vicente, en lo que respecta a las principales clases de activo la exposición media a renta variable se mantuvo básicamente estable en el 38,1%, sólo marginal y progresivamente por debajo de los niveles de los trimestres anteriores. Renta fija y alternativos también experimentaron pequeñas reducciones de las exposiciones medias respecto al trimestre anterior y se situaron en el 49,6% y 5,1% respectivamente.
“Por el lado de la renta variable las gestoras de pensiones españolas parecían detectar oportunidad en las bolsas asiáticas y emergentes en general, al calor de las caídas asociadas al coronavirus afectando a China y otras economías asiáticas, con un 47% de las mismas considerando que dichos activos se encontraban sobrevendidos”, relata Juan Manuel. En este sentido, un 35% del panel de gestoras expresaba que sería deseable aumentar exposición en los próximos meses, solamente superado ligeramente por la eurozona, donde un 41% de las gestoras eran de dicha opinión.
Los bonos verdes, una opción popular en renta fija
En cuanto a la renta fija, el experto destaca que la deuda española continuaba siendo la que un mayor porcentaje de gestores sobreponderan en sus carteras (un 59%). Por otro lado, según detalla Vicente, “la deuda del tesoro norteamericana seguía ganando atractivo y ya un significativo 41% del panel pensaba aumentar su exposición a uno de los activos refugio por excelencia versus el 29% del trimestre anterior”.
Asimismo, el informe desprende que la renta fija corporativa seguía viéndose como «claramente sobrevalorada» en términos de diferenciales, “nada nuevo pero que destaca por la persistencia en el tiempo de estos resultados”, añade Juan Manuel Vicente. Finalmente, el experto destaca como «casi máximo histórico» que dos terceras partes del panel consideraban al dólar sobrevalorado. “Por el contrario, aumentaban significativamente los gestores que veían al euro valorado correctamente, aunque siguen siendo ligera mayoría los que ven a la divisa europea como infravalorada”, completa.
Por otro lado, los resultados de la encuesta también confirman ciertos posicionamientos del sector. Por ejemplo, en lo que respecta a la inversión por factores cerca de un 60% del panel afirma no utilizar actualmente dicho enfoque de inversión, pero más de la mitad de dicho porcentaje (35%) lo está contemplando. “De aquellos que lo utilizan son clara mayoría los que utilizan un enfoque multi-factor que se adapte al ciclo de mercado y minoría los que utilizan un enfoque mono-factor, eligiendo cada uno de ellos de forma estratégica o táctica. La demanda de inversión verde en la renta fija tiene su respuesta en las gestoras de pensiones españolas con un 47% de estas ya invertidas por ejemplo en bonos verdes de impacto y un destacado 41% que lo está estudiando”, detalla.
Según explica Philippe Muñoz, director de Inversiones de Santander Pensiones, “es destacable que los bonos verdes, por ejemplo, han tenido un comportamiento más favorable que sus homólogos de crédito, lo que nos lleva a seguir destacando que la inversión sostenible, como la que ofrecemos a través de la gama de pensiones Mi Proyecto Sostenible, seguirá aportando valor añadido a las carteras”.
La deuda privada y los préstamos (senior loans) siguen siendo las que despiertan más interés
“La inversión en “Green Credit Continuum”, que busca financiar proyectos verdes diversificando las fuentes de rendimiento combinando diferentes activos dentro del crédito, disfruta de menor popularidad de momento”, explica Vicente. Para él, la pregunta sobre el uso de diferentes estrategias no líquidas pone de relieve, una vez más, que la deuda privada y los préstamos (senior loans) siguen siendo lo que despierta más interés, seguido del private equity y a mayor distancia la financiación de infraestructuras.
Otros activos potencialmente diversificadores como los bonos catástrofe o cat bonds, que cubren una serie de eventos catastróficos como por ejemplo huracanes o terremotos, los fondos hedge neutrales a mercado o el inmobiliario reciben claramente menor atención.
Por último, según explica Vicente, dentro de estrategias de renta fija, la deuda emergente, incluyendo la china, recibe un interés razonable mientras que los fondos de vencimiento fijo reciben mucho interés por parte de un pequeño segmento del panel.