Luego de que se registraran problemas en algunas transferencias electrónicas en México, el banco central decidió eliminar temporalmente a los intermediarios y hacer que todos los bancos (incluso los no afectados) se conecten directamente a su sistema SPEI, entre otras medidas.
En teoría, los problemas se dieron porque un grupo de hackers entró al sistema de los proveedores que usan los bancos para enlazar SPEI con sus propias plataformas, realizando transferencias irregulares por más de 300 millones de pesos (15 millones de dólares). Sin embargo el propio SPEI no fue comprometido. De acuerdo con Banxico: «Cabe destacar que la infraestructura y el sistema central del SPEI en el Banco de México no han sufrido afectación alguna. La infraestructura de pagos y el SPEI se han mantenido en operación y han seguido procesando los millones de transferencias que se generan de manera ordinaria cada día».
Para evitar que se repita esta situación, Banxico, decidió emitir disposiciones que «le den a los bancos y demás entidades espacio para que implementen medidas de control adicionales que fortalezcan sus sistemas de detección de transferencias irregulares, verificar la integridad de sus operaciones y evitar posibles afectaciones a dichas instituciones, al resto de los participantes y al sistema en su conjunto».
En particular, por medio de la Circular 4/2018, y hasta que el Banco de México lo considere conveniente, los participantes contarán con un día para entregar en efectivo o cheques de caja los recursos correspondientes a transferencias por montos iguales o superiores a 50.000 pesos, excepto en aquellos casos autorizados expresamente por los participantes.
Por otra parte, mediante la Circular 5/2018, «a los participantes en el SPEI que reciban transferencias de fondos, y que así lo soliciten, se les podrá autorizar que puedan llevar a cabo las validaciones de dichas transferencias en periodos de tiempo superiores a los establecidos en las reglas aplicables para el abono de los recursos en las cuentas de los clientes beneficiarios (5 o 30 segundos, dependiendo del tipo 3 de participante), hasta en tanto concluyan las automatizaciones de las verificaciones que deben desarrollar».
En respuesta, la Asociación de Bancos de México (ABM) informa:
- Los recursos de los clientes de la banca no han estado en riesgo. En todo momento los bancos responderán a la confianza de sus clientes.
- Si bien hay retrasos en las transferencias, en particular en algunas instituciones, las operaciones no se han interrumpido, y se siguen ejecutando ya sea en el sistema SPEI o bien en el sistema alterno COA.
- Los bancos han atendido puntualmente las instrucciones de Banco de México de operar en sistemas alternos cuando ha sido necesario; los mecanismos de contingencia que se han puesto en marcha han permitido mantener la seguridad de las operaciones, en beneficio de los clientes.
- Las causas de estos atrasos se están revisando por todos los participantes. Hasta no disponer de conclusiones documentadas, no es posible establecer ni su origen ni sus alcances, pero claramente no han afectado a todo el sistema bancario ni a todos sus clientes.
- Las instituciones bancarias se mantienen en total coordinación con las autoridades, a fin de atender la coyuntura que se ha presentado en el sistema SPEI, garantizando el cuidado de los recursos de los clientes que, reiteramos, no se han visto afectados.
- En virtud de que estas afectaciones no son generalizadas, es importante estar atentos a la información que cada banco emita a sus clientes y usuarios.
«Cabe recordar que, de acuerdo con cifras de Banco de México, en el año de 2017 se realizaron más de 480 millones de operaciones vía SPEI por un monto de 270,4 billones de pesos, reflejo de un sistema robusto, que opera con seguridad y continuidad» concluyó la ABM.