España y Europa están comprometidas con la protección del inversor minorista: hoy el Boletín Oficial del Estado español ha publicado la Circular 1/2018 de la CNMV sobre advertencias relativas a instrumentos financieros, que entrará en vigor dentro de tres meses, mientras la Autoridad Europea de Valores y Mercados, ESMA, ha acordado prohibir las opciones binarias y establecer ciertas restricciones a la comercialización de contratos por diferencias (CFD) para proteger a los inversores minoristas.
Sobre el primer tema, la nueva circular de la CNMV sobre advertencias de instrumentos financieros establece tres tipos de advertencias que las entidades de crédito y empresas de servicios de inversión deberán hacer a sus clientes. En primer lugar, una advertencia de especial complejidad. A juicio de la CNMV, determinados instrumentos de elevada complejidad y nivel de riesgo no resultan adecuados, con carácter general, para su difusión generalizada entre el público minorista. Entre estos productos figuran, entre otros, los contratos por diferencias (CFD) y las opciones binarias, la deuda convertible, la perpetua y, en determinados casos, la deuda subordinada y los derivados OTC. En estos casos, además, se refuerza el consentimiento informado al obligar a las entidades a recabar la siguiente expresión manuscrita del cliente: “Producto difícil de entender. La CNMV considera que, en general, no es conveniente para inversores minoristas”.
En segundo lugar, una advertencia sobre pasivos admisibles para la recapitalización interna y, en tercer lugar, una advertencia sobre diferencias significativas con respecto al valor del instrumento. “Los clientes minoristas deben ser advertidos expresamente cuando los costes incluidos en determinados instrumentos financieros sobre los que realicen operaciones de compra o venta resultan relevantes y no fácilmente reconocibles. Entre estos instrumentos figuran la renta fija cuando la contrapartida sea la propia entidad, los contratos financieros estructurados y determinados derivados OTC”, dice la CNMV.
En paralelo a estas medidas, ESMA ha adoptado otras a nivel europeo que también afectan a los contratos por diferencias (CFD) y a las opciones binarias que se ofrecen a los inversores minoristas en la Unión Europea (UE). Con respecto a las opciones binarias, se prohíbe la comercialización, distribución o venta de opciones binarias a los inversores minoristas, y sobre los contratos por diferencias, se restringe la comercialización, distribución o venta a los inversores minoristas. Las restricciones consisten en fijar límites de apalancamiento a las posiciones abiertas, imponer una obligación de cierre de posiciones en las cuentas en caso de consumo de garantías; establecer un mecanismo de protección frente a saldos negativos a nivel de cuenta del cliente; impedir el uso de incentivos por parte de los proveedores de CFD; y establecer una advertencia estandarizada sobre el riesgo correspondiente a cada entidad.
Esto se debe a la complejidad y falta de transparencia de los productos; las características específicas de los CFD (apalancamiento excesivo) y de las opciones binarias (rentabilidad negativa estructural esperada y conflicto de intereses implícito entre proveedores y clientes); la disparidad entre la rentabilidad prevista y el riesgo de pérdidas; y cuestiones relativas a la comercialización y distribución. Además, los análisis realizados por las autoridades nacionales (ANC) sobre las operaciones con CFD en distintos territorios de la UE ponen de manifiesto que las inversiones de entre el 74% y el 89 % de las cuentas minoristas suelen generar pérdidas, las cuales oscilan entre 1.600 y 29.000 euros de media por cliente. En los análisis de las ANC sobre las opciones binarias también se han detectado pérdidas reiteradas en las cuentas de los clientes minoristas. La Junta de Supervisores de ESMA adoptó estas medidas el 23 de marzo de 2018.
La CNMV, de acuerdo
Se trata de la primera vez que se aplica este tipo de medidas excepcionales de intervención de productos financieros previstas en MiFIR (reglamento europeo que forma parte del paquete MiFID II) para proteger a los inversores. Esta norma prevé que ESMA pueda adoptar estas medidas de forma temporal y renovarlas cada tres meses y que, sin embargo, las autoridades nacionales pueden tomarlas de forma permanente. La CNMV considera que la adopción en este caso por ESMA de estas medidas es especialmente adecuada, ya que se trata de productos con un alto nivel de distribución transfronteriza y por medios electrónicos en toda Europa.
La CNMV también quiere llamar la atención sobre las medidas adoptadas en relación con CFD con criptomonedas como activo subyacente, a los que se aplican los límites de apalancamiento más exigentes. ESMA y las autoridades nacionales están preocupadas por los riesgos específicos de las criptomonedas, como su falta de transparencia, su complejidad y la falta de fiabilidad de su valoración, dicen en un comunicado. En los próximos meses, continuarán monitorizando los instrumentos financieros que supongan exposición de inversores a criptomonedas y evaluarán la necesidad de medidas más estrictas.
Los pasos
ESMA tiene previsto adoptar estas medidas en las lenguas oficiales de la UE en las próximas semanas y, a continuación, publicará un comunicado oficial en su sitio web. Seguidamente, las medidas se publicarán en el Diario Oficial de la UE (DOUE) y entrarán en vigor un mes después de la publicación, en el caso de las opciones binarias, y dos meses después, en el caso de los CFD.
“Las medidas que ha anunciado hoy ESMA servirán para garantizar una mayor protección del inversor en la UE, ya que asegurarán un nivel mínimo común de protección para los inversores minoristas. Las nuevas medidas relativas a los CFD asegurarán, por primera vez, que los inversores no pierden más dinero del que invierten, restringirán el uso del apalancamiento y los incentivos y proporcionarán una advertencia sobre el riesgo a los inversores. En cuanto a las opciones binarias, la prohibición acordada resulta necesaria para proteger a los inversores debido a las características de los productos”, comenta Steven Maijoor, presidente de ESMA.
“La combinación de una promesa de alta rentabilidad con plataformas digitales en las que es fácil operar, y unos tipos de interés en mínimos históricos como telón de fondo, ha creado una oferta muy atractiva para los inversores minoristas. Sin embargo, la complejidad intrínseca de los productos y su excesivo apalancamiento —en el caso de los CFD— ha generado considerables pérdidas para este tipo de inversores”.