La Comisión Nacional del Mercado de Valores ha presentado esta mañana en Madrid su plan de actividades para este año, con la mirada puesta, entre otras cosas, en los fondos de inversión y en las entidades de servicios financieros, con el objetivo de asegurar el cumplimiento de MiFID II. Entre los cuatro bloques en los que pueden agruparse los 50 objetivos que se plantea, está el de supervisión de los intermediarios financieros y en ese ámbito figuran las tareas que se marca en cuanto a fondos de inversión y ESIs.
Según anunció Sebastián Albella, presidente de la CNMV, el supervisor tiene previsto, durante unos meses, revisar la publicidad relativa a nuevos fondos de inversión, es decir, los materiales publicitarios que se utilicen para su comercialización. “Es un ejercicio no de análisis de publicidad a través de las redes, o dirigido a identificar y analizar sus contenidos, sino sobre las publicidades relativas a nuevos fondos que las gestores soliciten registrar. En el proceso, a la vez que registrar el folleto, pediremos los materiales publicitarios para analizarlos, con el objetivo de identificar posibles prácticas inadecuadas”, explica el presidente. La finalidad es promover una mejora de esas prácticas, en el caso de detectarse problemas, y extraer conclusiones a cerca de qué está moviéndose en el mercado de la publicidad de fondos, y ver si tiene sentido ofrecer recomendaciones generales al sector.
Otro de los grandes objetivos este año tiene que ver con MiFID II, a pesar de que la normativa no está transpuesta en su totalidad: la CNMV quiere revisar el nivel de adaptación de las ESIs a las nuevas obligaciones de información relativas a incentivos y costes de MiFID II. “Nos preguntamos si era posible realizar una revisión temprana de los requisitos, con una transposición tardía y la conclusión fue que sí”, dice Albella, recordando que la transposición tardía es solo parcial y que, en muchos aspectos, MiFID II profundiza sobre la norma que ya existía con anterioridad. “Realizar este ejercicio incluso sobre la parte no transpuesta aún –la parte de los incentivos- tiene sentido, porque queremos ser coherentes con nuestro mensaje, animando a las entidades a adelantar la preparación de cara a la normativa, y también para asegurarnos de que el día en que se complete la implementación las entidades puedan cumplir adecuadamente”, asegura.
Albella matiza que no se trata de una acción inspectora para castigar incumplimientos, sino que trata de reforzar “el mensaje de ánimo para las entidades de cara a la preparación y anticipación” de la nueva cultura que implica MiFID II. Con respecto a la normativa, también explicó que un ejercicio de mistery shopping de la CNMV irá destinado a analizar la aplicación de la normativa.
También en el plano de la supervisión de los intermediarios financieros, la CNMV busca este año revisar el cumplimiento de las obligaciones del reglamento PRIIPS, que obliga a entregar a los inversores en vehículos como los seguros el documento de datos fundamentales o KID: la CNMV realizará una primera revisión horizontal al respecto.
Otras dos medidas recogidas en el plan a este respecto son la aprobación de medidas nacionales restrictivas en la operativa con opciones binarias y CFDs y la revisión de la aplicación de la guía técnica sobre operaciones vinculadas relativas a instrumentos financieros realizadas por sociedades gestoras de IICs.
Los otros objetivos
Los otros bloques en los que se agrupan sus objetivos son lograr mejoras en el funcionamiento de la CNMV, supervisión de los mercados, y relaciones con los inversores y otras partes interesadas, siempre bajo cinco líneas estratégicas: priorizar la supervisión y la promoción de la transparencia e integridad del mercado; contribuir a potenciar el atractivo y la competitividad de los mercados financieros españoles; atención y fomento de la estabilidad financiera; educación financiera y atención a los inversores y, algo incorporado este año, el fomento de los desarrollos tecnológicos y la prevención de sus potenciales riesgos asociados.
Con respecto a los objetivos de mejora del funcionamiento de la CNMV, busca la finalización del proceso de digitalización de la CNMV (más del 85% de los documentos y comunicaciones del exterior ya se reciben a través de procedimientos telemáticos, y el objetivo es aproximarse al 100%, y cumplir con todas las exigencias de la administración electrónica que impulsa el Gobierno); lanzar una aplicación para dispositivos móviles y tabletas; publicar indicadores clave de rendimiento de la CNMV; desarrollar un plan de formación dentro de la CNMV en nuevas tecnologías; realizar un análisis estructurado de aplicaciones del blockchain en el mercado de valores; publicar criterios sobre criptomonedas (un objetivo cumplido en cierta medida con los últimos comunicados emitidos recientemente, uno con el banco de España y otro de forma independiente). “Hemos ido más allá que los supervisores europeos acerca de estos fenómenos”, indicó Albella.
Sobre la supervisión del mercado, sus objetivos buscan realizar un informe acerca de la implementación de las NIIF 9 y 15; también, sobre la primera cumplimentación del Estado de Información No Financiera; análisis de las prácticas y posible guía técnica sobre comisiones de nombramientos y retribuciones; revisión de criterios sobre publicación de información relevante o privilegiada por los emisores de valores (posible guía técnica); acciones específicas de supervisión de la calidad de los datos de referencia de instrumentos financieros (FIRDS) y de las comunicaciones diarias de operaciones (transaction reporting); y preguntas y respuestas sobre ofertas públicas de adquisición y procesos de salidas a bolsa.
Sobre las relaciones con inversores y otras partes interesadas, los objetivos pasan por la identificación de buenas prácticas en la difusión de información por parte de los emisores de valores, lo que implica también la relaciones con medios. “En los últimos meses hemos tenido reuniones con emisores de empresas cotizadas y asociaciones de periodistas, con el objetivo de conocer mejor las relaciones de las empresas y los medios, para identificar buenas prácticas a difundir con el objetivo de mejorar la calidad de la información de los medios”, indica Albella. En este ámbito también anunció la apertura de una delegación de la CNMV en Bilbao; su intención de realizar un análisis del sector financiero no bancario en España (intermediarios financieros); la creación de un observatorio sobre el shadow banking en España; un análisis detallado de los resultados de la encuesta de competencias financieras de la población (a punto de publicar junto con el Banco de España); ayudar en la promoción de la presencia de personal español en organismos europeos del sector financiero (han formado un grupo interno de trabajo que haga propuestas y dinamice la actividad de la casa en este terreno); la firma del nuevo acuerdo de cooperación multilateral de IOSCO; y mejorar los servicios de atención al cliente (“queremos mantener reuniones y contactos con al menos 10 entidades, al objeto de trasladarles la valoración que nos merece su servicio, e identificar áreas de mejora, y mejorar la coordinación entre los servicios de atención al cliente de la CNMV y los de las entidades, para evitar discrepancias”, añade Albella).
Cumplimiento de los objetivos de 2017
Antes de enumerar sus objetivos para este año, el presidente de la CNMV explicó que el grado de cumplimiento de los objetivos el año pasado fue muy alto, del 86%. “Contribuimos a la supervisión y transparencia del mercado, a ofrecer atractivo y competitividad a los mercados españoles en el contexto del Brexit, al fomento de la estabilidad financiera y a mejorar la educación financiera”. Con respecto al aumento del atractivo en el momento del Brexit, reconoció sin embargo que la situación de Cataluña no ayudó mucho, debido a la debilidad en la estabilidad que puede ofrecer un país para ser atractivo.