En el marco de las negociaciones sobre el presupuesto de 2019, los gobernadores provinciales de Argentina han pedido al gobierno que suba los impuestos a los activos argentinos en el exterior, lo que tendrá un impacto en todos los capitales y bienes que ingresaron al blanqueamiento fiscal.
Así, algunas fuentes dan por seguro que el impuesto pasará a ser del 0,25% actual al 1%.
La subida afectaría a las inversiones financieras e inmuebles que los argentinos tienen en el exterior, muchas veces por falta de confianza en la solvencia de su país. Esos contribuyentes ya experimentaron este año la eliminación de exenciones tributarias relativas a la renta financiera.
El blanqueo de capitales alcanzó los 116.800 millones de dólares en Argentina, según cifras oficiales de 2017. De esa cantidad, 93.300 millones de dólares se quedaron en el exterior y solo 23.500 millones regresaron al país.