El Consejo de Estabilidad Financiera (Financial Stability Board, o FSB por sus siglas en inglés) anunció el pasado 31 de julio que esperará a finalizar su metodología para identificar a gestoras y fondos de inversión con riesgo sistémico para completar su informe de valoración de riesgos de estabilidad de gestoras. Esto permitirá al FSB un mayor análisis de los potenciales riesgos de las gestoras y los fondos que puedan afectar a la estabilidad del sistema financiero global.
El FSB, junto con la Organización Internacional de Comisiones de Valores (IOSCO), publicaron el pasado 4 marzo de 2015, el segundo documento consultivo sobre la metodología para identificar gestoras con riesgo sistémico. En el documento los dos organismos se enfocaban en los riesgos asociados con la liquidez del mercado y las actividades de gestión en la coyuntura actual, así como las fuentes potenciales de vulnerabilidad asociadas a las actividades de gestión de activos.
En la publicación del documento se invitaba a recibir comentarios sobre las metodologías empleadas, y más de 50 comentarios fueron recibidos, entre los que destacan gestoras como Amundi, BlackRock, Franklin Templeton, Fidelity, Invesco, PIMCO, y Vanguard, así como importantes entidades y asociaciones de inversores profesionales.
“Las gestoras son entidades altamente reguladas con requerimientos regulatorios específicos. Las operaciones globales no complican la disolución de una gestora, porque los activos de los clientes están separados de la gestora mediante un custodio. En otras palabras, los activos de los clientes no están incluidos en el proceso de liquidación por bancarrota de una gestora, y por lo tanto no impactan en la disolución de la entidad independientemente de donde está domiciliada”, apunta BlackRock entre sus comentarios al documento consultivo.
Por su parte la Asociación de la Industria de Valores y Mercados Financieros (Securities Industry and Financial Markets Association o SIFMA), había solicitado en julio que las autoridades regulatorias tuvieran en cuenta las características únicas de las entidades gestoras, y que cambiaran el enfoque de la evaluación de riesgos. “Mientras apreciamos la oportunidad de proporcionar retroalimentación al FSB en su proceso de revisión, sostenemos preocupaciones porque varios de los temas abordados no están alineados con la política anunciada de un enfoque de evaluación de productos y actividades, lo cual sugiere un malentendido persistente de la industria de gestión de activos”, comentó Timothy Cameron, director ejecutivo de SIFMA Asset Management.
El comunicado del FSB fue interpretado por la industria como una victoria en el enfoque que los organismos regulatorios deben tomar a la hora de añadir nuevas normativas sobre las gestoras. A juicio de las gestoras, el riesgo en los fondos de inversión o en las gestoras no se deriva de su tamaño, sino más bien en la liquidez de los mercados en los que operan, o el riesgo intrínseco de los instrumentos que utilizan, así como el excesivo endeudamiento de los productos o de las actividades que se acometen.
El FSB publicará los resultados iniciales de este análisis en su reunión de septiembre de este año, e informará de los mismos al G20 en el transcurso del año. Además ha adoptado el compromiso de desarrollar las recomendaciones políticas necesarias para la primavera de 2016. Será entonces cuando comience a llevar a cabo el análisis y finalización de la metodología para identificar a gestoras y fondos de inversión con riesgo sistémico, “con énfasis en cualquier origen residual de riesgo sistémico de entidades con dificultades financieras o con posibilidad de entrar en una quiebra desordenada, que no puede ser afrontada de forma efectiva por la regulación del mercado”, según reseña el comunicado.