Para mejorar la unión de los mercados de capitales (UMC) europea y reforzar la protección de los inversores, el Consejo Europeo ha llegado a un acuerdo en torno a su posición, es decir, su orientación general, respecto a la revisión de la Directiva sobre los gestores de fondos de inversión alternativos, que es el marco legislativo que regula a los gestores de fondos de inversión libre, fondos de capital de inversión, fondos de inversión de créditos privados, fondos inmobiliarios y otros fondos de inversión alternativos en la Unión.
Según recuerda la institución, la finalidad de la propuesta es mejorar la integración de los mercados de gestión de activos en Europa y modernizar al mismo tiempo el marco para los principales aspectos normativos. “La propuesta no solo actualiza la Directiva sobre los gestores de fondos de inversión alternativos (AIFM), sino también las normas aplicables a los organismos de inversión colectiva en valores mobiliarios (UCITS), que es el marco normativo que permite la venta de fondos de inversión en toda Europa”, señalan.
Los cuatro objetivos principales de la propuesta son: lograr una mayor integración del mercado para los fondos de inversión alternativos y, por lo tanto, una integración más amplia del mercado de capitales; mejorar el acceso de las empresas a formas de financiación más diversificadas; reforzar la protección de los inversores; y mejorar la capacidad de los gestores de fondos para hacer frente a la presión sobre la liquidez en situaciones de tensión en los mercados.
Principales ideas y modificaciones
En su posición, el Consejo destaca la importancia que reviste una armonización coherente en el ámbito de la gestión del riesgo de liquidez. Y subraya, en particular, la necesidad de mejorar la disponibilidad de instrumentos de gestión de la liquidez, con nuevos requisitos para que los gestores procedan a la activación de dichos instrumentos. En este sentido, se garantizará con ello que los gestores de fondos estén bien equipados para hacer frente a salidas de depósitos significativas en tiempos de turbulencias financieras.
El Consejo respalda además la creación, como propone la Comisión Europea, de un marco de la UE para los fondos que originan préstamos, es decir, aquellos fondos que ofrecen créditos a las empresas, complementado con varios requisitos destinados a reducir los riesgos para la estabilidad financiera y garantizar un nivel de protección adecuado de los inversores.
Además, el Consejo aclara en mayor medida las normas para la externalización y la delegación a terceros de determinadas funciones de los gestores de fondos, y aumenta la cooperación en materia de supervisión en este ámbito. Adopta asimismo nuevos requisitos de información en lo que respecta a los acuerdos de delegación, con objeto de mejorar el seguimiento y la supervisión de la aplicación del marco regulador de la UE. Contar con obligaciones precisas de información sobre la externalización reducirá la posibilidad de que se creen sociedades ficticias.
Según su comunicado, otras cuestiones clave para el Consejo son el marco para la prestación de servicios transfronterizos por parte de los depositarios, las nuevas obligaciones de información para los UCITS a efectos del control de riesgos y las nuevas normas de transparencia para mejorar la protección de los inversores.
La reacción de la industria
Ante este enfoque y propuesta, la industria ha acogido con satisfacción el trabajo de la Comisión Europea. “Las modificaciones propuestas por el Consejo suponen un reconocimiento de la resistencia y la eficacia del marco existente, al tiempo que proponen mejoras clave que, en nuestra opinión, contribuirán a garantizar la consecución de los objetivos de la UMC y a apoyar el crecimiento de una economía europea más fuerte e integradora”, destacan desde la Asociación Europea de Fondos y Gestión de Activos (Efama, por sus siglas en inglés).
Para esta organización, la creación de herramientas de gestión de liquidez es una decisión acertada. Según destaca Tanguy van de Werve, director general de Efama, “en los últimos años, los gestores han garantizado la resistencia de sus fondos frente a las graves perturbaciones causadas por los trastornos de la economía real. Reforzar su caja de herramientas con una gama más amplia de instrumentos de gestión de la liquidez es el mejor medio para mejorar tanto la protección de los inversores como la estabilidad financiera de cara al futuro”.
Por último, otra de las propuestas que celebran y apoyan desde Efama es la decisión del Consejo de no introducir un pasaporte del depositario en el régimen revisado de la DFAI. “El requisito de que el depositario comparta el mismo domicilio que el fondo debería mantenerse, ya que representa una importante salvaguarda para la protección del inversor. También acogemos con satisfacción la decisión del Consejo de exigir a los AIFM que demuestren la falta de servicios de depósito pertinentes en su propio Estado miembro, antes de aprovechar el nombramiento de un depositario en otra jurisdicción”, concluyen.