Una fecha clave para la industria fintech en Chile está a la vuelta de la esquina. El 3 de febrero culmina el plazo –entregado por la Ley 21.521, conocida como Ley Fintech– para que soliciten su inscripción y autorización en la Comisión para el Mercado Financiero (CMF). De este requisito depende su posibilidad de seguir operando.
Según recordó la fintech local Btrust en un comunicado, a partir de esa fecha, las empresas que no hayan completado el formulario de registro deberán cesar sus funciones hasta que logren regularizar la situación posteriormente.
El trámite consiste en que cada compañía tecnológica financiera entregue información detallada sobre la razón social de la empresa y características de sus servicios financieros, entre otros aspectos. Además, solicita detalles sobre fuentes de financiamiento, gestión, riesgos y seguridad en la información.
Estos requisitos fueron establecidos por la Ley Fintech, promulgada en enero de 2023. El objetivo de la normativa es fomentar la innovación, transparencia, competitividad y seguridad en el sector financiero chileno.
La relevancia de que las fintech regularicen su situación se ve subrayada por las estimaciones de que hay alrededor de 500 de estas empresas en el país. Sólo alrededor de 300 ya han realizado el trámite.
En esa línea, el consejo de Patricio Cortés, fundador y CEO de Btrust, es no esperar hasta el último momento para cumplir con la exigencia regulatoria. “Hay que considerar que la inscripción no es automática. Es decir, luego de recibir el formulario la CMF tiene dos meses para dar el visto bueno y aceptar la solicitud”, indicó a través de la nota de prensa.
“Sólo con aquella aprobación la empresa podrá solicitar autorización a la CMF para operar, por lo que esperar hasta último momento puede significar el riesgo de cierre de las operaciones”, recalcó.