Según Jonathan Rosenthal, la banca de inversión se enfrenta a un futuro más modesto y sencillo. Es una de las conclusiones del informe especial sobre banca de inversión publicado por The Economist, que también apunta a que a pesar de todo, algunos bancos emergerán de la crisis más grandes y poderosos
Los ingresos en banca de inversión se han reducido de 350.000 a 250.000 millones de dólares desde 2009 hasta ahora, una caída que no solo se debe al momento del ciclo económico
Como apunta Rosenthal, editor de The Economist, las novedades regulatorias como Basilea III y la nueva normativa sobre derivados son culpables de los menores márgenes. La banca de inversión ya no es un negocio tan rentable, y de hecho algunos jugadores se están viendo obligados a abandonar el mercado. El problema es que los grandes bancos tienen un enorme riesgo sistémico y los reguladores no aprobarían grandes fusiones en el sector. En la entrevista grabada adjunta, Rosenthal explica que los bancos europeos se enfrentan a requerimientos de capital cada vez más estrictos y puesto que en ocasiones no pueden vender sus divisiones de banca de inversión por una cuestión de tamaño, se están viendo forzados a cerrarlas. Ha sido el caso de UBS, que ha decidido reducir drásticamente el tamaño de su negocio de banca de inversión para concentrarse en la actividad de gestión de patrimonios y banca privada.
The Economist subraya como en 2008, justo después de la explosión de la crisis financiera, los bancos europeos pensaron que era su momento de alcanzar a los americanos. Barclays, por ejemplo, se quedó con el negocio de banca de inversión de Lehman tras su quiebra, aunque poco después fue Barclays quién tuvo que ser intervenido. La reacción del regulador norteamericano fue más generosa, inyectando capital de forma masiva para recapitalizar su sistema financiero en menos tiempo que Europa, donde la banca todavía está lidiando con este problema. Como resultado, The Economist asegura que estamos, sin lugar a dudas, ante «el retorno de Wall Street».
Este informe especial se publica en la edición impresa de la revista The Economist el 11 de mayo de 2013. Puede ver un avance de sus conclusiones en el video adjunto.