El banco suizo UBS ha desvelado su decisión de integrar completamente Credit Suisse, entidad que adquirió en marzo, por lo que desaparecerá como marca en 2025. Esta decisión se hizo pública en el marco de la presentación de resultados de la entidad, en la que dio a conocer unos resultados récord de 29.904 millones de dólares en la primera mitad de 2023, siete veces mayores que en el mismo periodo de 2022.
Ambas entidades «operarán de forma separada hasta su integración legal en 2024» y «la marca Credit Suisse y sus operaciones seguirán hasta que se complete la migración gradual de clientes al sistema de UBS, proceso que esperamos finalizar en 2025», señaló el consejero delegado de UBS, Sergio Ermotti, en el informe de resultados de la entidad.
La decisión de integrar completamente Credit Suisse en UBS es, según señaló Ermotti «la mejor solución para la compañía, para nuestros accionistas y para la economía suiza».
El informe también desvela que UBS se ha visto obligado a asumir 238.000 millones de dólares de activos ponderados por riesgo de Credit Suisse, aunque asegura que «se ha estabilizado» en los últimos meses, con flujos de depósitos de 18.000 millones de dólares (16.400 millones de euros) en el segundo trimestre.
UBS también adelantó que, como parte de su estrategia para integrar Credit Suisse, figura el objetivo de recortar costes en más de 10.000 millones de dólares. Esto supondrá, según Reuters, el recorte de unos 3.000 puestos de trabajo solo en Suiza.
La previsión de ahorrar más de 10.000 millones de dólares de aquí a 2026 contrasta con una estimación anterior de 8.000 millones para 2027. La mayor parte del ahorro procederá de la reducción de plantilla, y los analistas habían calculado que podrían desaparecer entre 30.000 y 35.000 puestos de trabajo en todo el mundo.
Esos resultados también mostraron las dificultades que ha tenido UBS para persuadir a los clientes adinerados de Credit Suisses de que se queden en la entidad conjunta. Credit Suisse registró una salida neta de activos de 39.000 millones de francos suizos (44.400 millones de dólares) en el segundo trimestre, lo que sugiere que el rescate no ha logrado frenar la pérdida de confianza.
Pero UBS afirmó que las salidas se produjeron a un ritmo más lento en comparación con los trimestres anteriores y se volvieron positivas en junio. Por el contrario, la gestión global de patrimonios de UBS registró nuevos fondos netos por valor de 16.000 millones de dólares, la cifra más alta del segundo trimestre en más de una década.