El mercado latinoamericano de pensiones continúa creciendo, inmerso en un escenario lleno de retos económicos y financieros. En este entorno, los jugadores locales trabajan para abrirse a gestoras internacionales, en la medida en que la búsqueda de rentabilidad y de diversificación de riesgos se intensifica. Por eso, la distribución transfronteriza hacia la industria de pensiones de esta región supone la mayor oportunidad para los gestores de activos globales y proveedores de ETF, dice un reciente informe de Cerulli.
En 2012, ambos han alcanzado el hito de 100.000 millones de dólares en exposición por parte de fondos latinoamericanos, incluyendo las AFP chilenas y peruanas, Afores en México y fondos de pensiones cerrados brasileños, según Cerulli. El 75% de esa cifra (82.000 millones) ha sido canalizada a través de fondos transfronterizos y ETF, y el resto, de inversión en capital riesgo, productos estructurados, bonos y acciones. La cifra de inversores latinos en fondos y ETF transfronterizos es más del triple de la de 2008, cuando solo destinaban a ellos 25.000 millones.
Y esa cantidad podría seguir creciendo, en paralelo a la expansión del tamaño de esos sistemas privados de pensiones y a la incapacidad de los mercados locales de absorber esos capitales, tendencia aupada también por los cambios regulatorios que inciden en la diversificación de riesgos. “El patrimonio de los fondos de pensiones obligatorios de México y Chile se dobla cada cinco o seis años y será necesario que canalicen cada vez mayores porcentajes de sus activos fuera de sus fronteras”. Cerulli espera que los gestores locales de pensiones lleven gran parte de esos patrimonios a gestores externos en lugar de invertir en sus mercados locales, como en el pasado.
A diferente ritmo
El estudio muestra que los mercados de pensiones en Latinoamérica han mostrado patrones similares con respecto a su apertura hacia los mercados globales, solo que cada país está en distintos estadios de desarrollo: mientras Chile es el más abierto, seguido de Perú (cuyas AFP han ampliado recientemente su límite a inversión internacional al 40%), México y Colombia, Brasil es el mercado que menos inversiones internacionales incorpora, a pesar de ser el mayor y a pesar de que sus propósitos parecen ir también en esa dirección, según comentaba José Carlos H. Doherty, consejero delegado de la asociación brasileña de los mercados financieros y de capitales (ANBIMA), en una reciente entrevista a Funds Society.
Según sus perspectivas, el reciente cambio regulatorio en Chile (después de que la Superintendencia y el Ministerio de Finanzas permitieran a los fondos de pensiones de riesgo más bajo -denominados con la letra E- invertir en instrumentos internacionales como válvula de escape a la deuda local) supone una gran oportunidad y limitará la volatilidad generada en los flujos de entrada y salida hacia productos de gestoras foráneas (porque, en función del riesgo asumido en cada fondo, que van desde las letras A, con más riesgo, a E, con menos, los límites de inversión internacional van descendiendo).
Esperanzas en México, Brasil y Colombia
Pero si hay países que de verdad tienen un gran potencial para las gestoras de fuera, entre ellos está México, según Cerulli, puesto que las AFP chilenas están muy cerca de sus máximos permitidos en inversión internacional. En México pasa lo mismo con las Afores, pero los límites de inversión internacional son aún muy bajos (20%) y su sistema de pensiones obligatorio se expande muy rápidamente. “Con la nueva Administración, es probable que el límite legal se incremente hasta al menos el 40% y potencialmente el 50% de los activos totales, con sublímites para cada fondo en concreto dentro del sistema”, prevé Cerulli. Pero no habrá oportunidad para todos: el informe dice que este mercado, debido a los desincentivos regulatorios y fiscales, seguirá siendo una mayor oportunidad para cuentas gestionadas o ETF, mientras los fondos activos seguirán “fuera del menú” de las Afores.
En Brasil, la industria de pensiones puede posicionar un 10% en activos internacionales, si bien existen otras restricciones a las posiciones en un solo fondo. Pero Cerulli cree que eso podría cambiar y que la industria se abrirá a los mercados internacionales de capitales a medio plazo. En Colombia, considera que tras años de inversión en mercados locales, sus gestores de pensiones están “comprometidos” a realizar asignaciones de forma global, movidos por un Gobierno que quiere frenar la apreciación del peso. “En 2012 las posiciones internacionales eran del 15% y no esperamos una brusca subida porque no hay regulación que la incentive pero creemos que la bendición del Gobierno para invertir fuera es siempre bienvenida”.
El papel de los ETF
Según Cerulli, en este entorno de mayor apertura la oportunidad para los proveedores de ETF también es fuerte. “Dada la flexibilidad de los partícipes en pensiones a la hora de cambiar sus activos entre diferentes fondos con distinta exposición al riesgo, y por tanto, cambiar el nivel de asignación internacional, los ETF pueden emerger como grandes ganadores cuando las AFPs se vean forzadas a realizar un trade más activo”, dice el informe.
Acceso a bajo coste
“La industria de pensiones en Latinoamérica ha sido una fuente clave de asignaciones para los gestores globales y de ETF a lo largo de los años y las buenas noticias son que, aunque altamente competitiva, sigue suponiendo un esfuerzo de bajo coste”, según el estudio. De hecho, algunos de los grandes distribuidores han captado más de 5.000 millones de dólares sin tener oficinas o productos locales, sino solo trabajando con terceras entidades que los representan y realizando visitas ocasionales. La reputación del gestor, su rentabilidad, la consistencia o la comunicación han sido las características tenidas en cuenta al elegir entre gestores globales.