Schroders, BlueOrchard Finance Ltd, y el Ministerio de Finanzas de Luxemburgo han anunciado el primer cierre del fondo Green Earth Impact, que se gestiona conjuntamente entre BlueOrchard, como gestor de inversiones, y Schroders como GFIA que presta servicios de riesgo y de cartera al fondo.
El fondo Green Earth Impact permite a los inversores profesionales invertir en una cartera de fondos, que tratan de abordar la protección del medio ambiente y el cambio climático y beneficiarse de mecanismos de reducción del riesgo, como cobertura de primera pérdida. El fondo se creó en junio de 2022 y ahora ha logrado su primer cierre con un compromiso de 25 millones de dólares del Ministerio de Finanzas luxemburgués. El fondo Green Earth Impact está diseñado como un vehículo de valor añadido para impulsar y canalizar inversiones sostenibles y de impacto en la mitigación del cambio climático, la adaptación al mismo y la protección del agua y la biodiversidad.
Sin dejar de ser altamente selectivo en un mercado en crecimiento, el fondo Green Earth Impact se centra en captar oportunidades de inversión en mercados emergentes y frontera que contribuyan a los objetivos de impacto del fondo y garanticen, al mismo tiempo, una amplia diversificación entre regiones geográficas y clases de activos. Según explican las firmas, las oportunidades de inversión se seleccionarán combinando diferentes criterios comerciales, sectoriales y de impacto para ofrecer a los inversores una rentabilidad competitiva, contribuyendo al mismo tiempo al éxito de iniciativas y proyectos innovadores de inversión de impacto y sostenibles desde el punto de vista medioambiental.
“El cierre hoy de este innovador fondo de inversión es un hito significativo en nuestros esfuerzos por lograr un crecimiento sostenible y construir economías neutras en carbono y resilientes en los mercados emergentes. A medida que nos enfrentamos a desafíos medioambientales sin precedentes, es esencial que tomemos medidas proactivas para proteger nuestro planeta y garantizar un futuro sostenible para todos. Esta asociación de financiación mixta es un poderoso ejemplo de cómo los sectores público y privado pueden trabajar juntos para impulsar un impacto significativo. Con la creación del fondo y la aportación de una inversión de cobertura de primera pérdida, Luxemburgo subraya su compromiso de movilizar capital público y privado para contribuir a financiar un futuro más sostenible”, ha declarado Yuriko Backes, ministra luxemburguesa de Finanzas.
Por su parte, Philipp Mueller, consejero delegado de BlueOrchard, ha añadido: “Nos entusiasma ofrecer a los inversores profesionales la oportunidad de invertir en acción por el clima y biodiversidad en mercados en crecimiento, contribuyendo a la protección de las comunidades vulnerables y a una transición justa. Los inversores del fondo Green Earth Impact tendrán la oportunidad de beneficiarse de la estructura de financiación mixta de mitigación de riesgos del fondo, de una cartera diversificada de inversiones en fondos y de un exhaustivo proceso de selección de inversiones y evaluación de impacto”.
Por último, Finbarr Browne, consejero delegado de Schroder Investment Management (Europe) S.A., se ha mostrado orgulloso de este proyecto. “Desde que se anunció el proyecto en junio de 2022, hemos trabajado estrechamente con el Ministerio de Finanzas, BlueOrchard y varios proveedores de servicios para constituir el fondo y facilitar la inversión del Ministerio en este primer cierre. Nuestro enfoque conjunto se trasladará ahora a la captación de capital en Luxemburgo, en toda Europa y en otros mercados internacionales”, ha comentado.
Según destacan las tres firmas, la misión del fondo es reforzar el ecosistema de financiación sostenible, contribuir a la transición hacia economías neutras desde el punto de vista climático y resilientes, y lograr un crecimiento bajo en carbono y sostenible desde el punto de vista medioambiental en los mercados emergentes y frontera. Para ello, el vehículo tratará de cerrar la brecha de financiación público-privada mediante la atracción de capital, tanto del sector público como del privado.
El objetivo y el marco de inversión del fondo se modelan teniendo en cuenta el Acuerdo de París, la Estrategia Internacional de Luxemburgo para la Financiación Climática 2021-2025 y el Reglamento de Taxonomía de la UE, entre otros. Además, tiene como objetivo la inversión sostenible (en el sentido del artículo 9 de la SFDR) y se espera que invierta al menos el 90% de su valor liquidativo en inversiones consideradas sostenibles según la SFDR.