Panza Capital ha alcanzado en su primer año completo de gestión un total de 180 millones de euros de patrimonio bajo gestión procedente de cerca de 2.000 inversores. Así lo anunció Gustavo Trillo, consejero delegado de Panza Capital, en la presentación de la cuarta carta trimestral de la firma. Panza Capital nació a principios de 2022 y, aunque Trillo prefiere no dar objetivos de crecimiento para el próximo ejercicio, sí admitió que «quieren seguir haciendo las cosas bien».
El presidente y director de Inversiones, Beltrán de la Lastra, dio a conocer las previsiones de la firma y los cambios en las carteras de sus fondos. En definitiva, destacó la sensación de “calma preocupante” con la que han empezado los mercados y recordó que aunque los riesgos geopolíticos y financieros parece que no se han materializado, no significa que no estén latentes.
Su foco está puesto en que las fuertes y rápidas subidas de los tipos de interés tendrán consecuencias que aún no se han visto. Reconoce que hay compañías excesivamente endeudadas y que las refinanciaciones de los próximos uno o dos años deberían dejar claros cuáles son los efectos del encarecimiento del dinero.
De la Lastra, en lo que al ámbito empresarial se refiere, recordó que las empresas están generando ventas récord debido a las subidas de los precios y que en el apartado de gastos se están normalizando los costes laborales y estabilizando los energéticos. Estos últimos, eso sí, a unos niveles muy superiores a los anteriores a la última crisis energética.
“Para invertir, estamos en un momento de incertidumbre respecto a cuáles van a ser los márgenes sostenibles de las empresas”, señaló De la Lastra, que reiteró que las cifras de márgenes van a ser clave a la hora de invertir a lo largo del año. También hizo hincapié en tener cuidado con las compañías que tienen una deuda no razonable para el negocio que desempeñan.
Su estrategia ha reducido los valores que el experto denomina “ticket pequeño” y que está relacionado con el consumo minorista, como restaurantes, hoteles, viajes y aerolíneas y ha aumentado la exposición al “ticket grande” ante las expectativas de que el empleo va a terminar deteriorándose como efecto de las subidas de los tipos de interés. Por lo tanto, los sectores químico y construcción tienen ahora más peso en las carteras de los fondos de Panza Capital.
En este último, De la Lastra admite su interés en las promotoras británicas, que “han aprendido de la crisis de 2009” y ahora, lejos de tener deuda, cuentan con mucha liquidez.
Tampoco cree que sea buen momento para estar en el sector bancario. El experto admite que el escenario de 2023 fue «ideal» para el sector, pero ahora se cuestiona que pueda ser sostenible. Tras vender su posición en Bankinter, sus carteras ahora sólo tienen dos representantes del sector: la francesa BNP Paribas y la italiana Unicredit.
Además, ha dado entrada a Google, de la que reconoce que «no está barata», pero tiene mucho potencial de crecimiento.