A los altos patrimonios latinoamericanos les gusta utilizar empresas y fideicomisos en Nueva Zelanda. De acuerdo con la nueva publicación de los Papeles de Panamá, el número de fideicomisos extranjeros en Nueva Zelanda ha aumentado a casi 10.700 este año, desde menos de 2.000 hace diez años.
La firma Mossack Fonseca promovió activamente a Nueva Zelanda como un buen lugar para hacer negocios debido a que además de altos niveles de confidencialidad y seguridad jurídica, es una zona libre de impuestos.
Según un informe de Radio Nueva Zelanda, TVNZ y Nicky Hager, el gobierno de Nueva Zelanda dijo que comenzaría una revisión de sus leyes de fideicomiso extranjero después de los Papeles de Panamá destacaron vulnerabilidades en su marco legal que hacen al país atractivo para la evasión fiscal. Por su parte, el primer ministro, John Key, comentó que era «completamente erróneo» el ver a Nueva Zelanda como un paraíso fiscal, «si hay alguna necesidad de un cambio en esta área, el gobierno lo considerará y si es necesario, tomar medidas,» dijo.
De acuerdo con el informe, el principal contacto de Mossack Fonseca en Nueva Zelanda fue supuestamente Roger Thompson, co-fundador y director de la firma contable Bentley Nueva Zelanda, quien fue incluido en más de 4.500 documentos filtrados. Thompson comenta que, en su experiencia, el uso de fideicomisos para la evasión de impuestos no es común y su firma no ayudan a las personas para ocultar ilegalmente bienes. «Creo que la suposición de que todos los fideicomisos extranjeros Nueva Zelanda están siendo utilizados para propósitos ilegítimos es infundada y basada en gran medida en la ignorancia», dijo a Radio Nueva Zelanda.