Nuevas informaciones del consorcio internacional de periodistas de investigación (ICIJ), el diario alemán Süddeutsche Zeitung y organizaciones de Europa, Suramérica, Asia y África revelan nuevos datos sobre una serie de firmas offshore en Las Bahamas. En concreto, se habla de actividades en la jurisdicción caribeña de primeros ministros, ministros, miembros de casas reales, criminales convictos, una ex comisaria de la UE y otros políticos y conocidos.
Recientemente, el consorcio anunció que está haciendo públicos los detalles del registro de Bahamas, lo que crea una base de datos pública y online de firmas offshore establecidas en la región, llamada en ocasiones la Suiza del oeste. En cualquier caso, no hay que olvidar que tener este tipo de sociedades no es ilegal.
Entre los nombres más sonados de las informaciones, que siguen a las reveladas sobre las actividades en Panamá a raíz de datos del despacho de abogados Mossack Fonseca, está el de Neelie Kroes, ex comisaria europea de Competencia (cargo que ocupó de 2004 a 2010). Kroes figuró cinco veces en la lista de Forbes de las 100 mujeres más poderosas del mundo. Desde el año 2000 y hasta octubre de 2009 figuró como directora de una sociedad ‘offshore’ radicada en las Bahamas.
Tras su paso por la Dirección de Competencia, Kroes continuó su periplo europeo como comisaria de Agenda Digital, cargo que ocupó hasta 2014. En ninguna de las dos declaraciones de actividades que presentó ante la Comisión mencionó la compañía radicada en Bahamas, Mint Holdings.
Las normas europeas piden que se haga público cualquier tipo de actividad —remunerada o no— e intereses económicos relativos a los 10 años anteriores a la toma de poderes. En respuesta a las preguntas del ICIJ, Kroes ha asegurado que seguía como directora de la firma offshore debido a un “descuido administrativo”, por lo cual no se la eliminó hasta 2009. La sociedad se había establecido, ha explicado su abogado, para estudiar la posibilidad de invertir en Enron. La operación nunca se llevó a cabo, asegura, debido al su colapso.
Bahamas, aunque está fuera del registro de paraísos fiscales, se resiste a firmar el acuerdo para intercambio estandarizado y automático de información tributaria exigido por la OCDE y al que se han adherido 103 países. Durante el G-20 de este verano, el Gobierno de Nassau se ha comprometido a hacerlo en 2018.