MoraBanc se muestra convencido de que su negocio tiene que seguir creciendo vía América Latina después de los cambios regulatorios que han obligado a la banca andorrana, que siempre ha vivido del negocio de los residentes en Andorra, de los españoles y en menor medida de los franceses, a desarrollar su negocio fuera del ámbito español.
Así de contundente se mostraba Gilles Serra, CEO de MoraBanc Group, en una entrevista con Funds Society, en la que repasó la situación de su grupo en Andorra, analizó la situación de la banca privada y repasó las previsiones de crecimiento con especial atención a América Latina.
Desarrollar el negocio fuera de España
El máximo responsable de la entidad, que reconoce que Andorra es una plaza pequeña, puntualizó que desde el banco han apostado por desarrollar el negocio fuera del ámbito español “de cara a América Latina”. En este sentido, explicó que Latinoamérica no debe contemplarse como una región sino que debe analizarse país por país, pues todo análisis contrario partirá de un mal planteamiento. “Hay países que van mal, aunque en cada país se presentan oportunidades”.
Para América Latina tienen previsto realizar nuevas contrataciones para los mercados de México y Brasil y esperan duplicar su negocio de cara a final de año, en un mercado en el que “vamos creciendo muy rápido”, aunque aclaró que todo nuevo movimiento que vaya a realizarse en la región será muy bien medido.
El directivo explicó que la estrategia internacional está siendo muy bien estudiada y que no se lanzan a aperturas o compras de una manera precipitada.
Broker dealer en Miami
Desde MoraBanc han apostado por una pequeña compañía de asset management en Zurich y por una inversión más grande en Miami para dar servicio a los clientes latinoamericanos. El pasado mes de noviembre, la entidad montaba su bróker dealer en Miami. “Pensamos que había que dar un servicio diferente, por eso creímos que había que hacer una operación de bróker dealer, no una actividad clásica de banca privada. El negocio arranca muy bien”.
Recordó que en 2012 abrieron una oficina de representación en Uruguay, en donde el negocio está creciendo siguiendo un reflejo de la situación macroeconómica del Cono Sur.
Respeto a la posibilidad de comprar otras entidades, Serra se mostró muy contundente. “El costo de un banco no tiene nada que ver con el precio. Es muy complejo valorar un banco cuando lo compras”. Considera que las compras suelen salir mal porque nunca se puede valorar completamente lo que uno va a encontrarse tras la operación.
En cuanto a la posibilidad de abrir nuevos mercados en América Latina, Serra puntualizó que así como otros operadores locales han apostado por otros países de la región, desde MoraBanc todavía no tienen esa necesidad. Por el momento están bien como están y dentro de un par de años podrían analizar otras aperturas en Latinoamérica.
“La cartera modelo estaba de moda hace 20 años”
En cuanto a su política de inversión, el CEO dijo que para el cliente pequeño cada día hay mejores productos, mientras que para los clientes grandes se funciona de acuerdo a las necesidades individuales. “No somos mucho de cartera modelo, hablamos más en términos de perfil de riesgo personal. La cartera modelo estaba de moda hace 20 años cuando las transacciones eran muy caras”, mientras que hoy el cambio tecnológico ha permitido inversiones más a medida.
Seguridad y estructura jurídica versus producto
El directivo, que puntualizó que adaptarán la oferta a las necesidades de sus clientes, considera que actualmente la demanda no se encuentra en los productos, ya que “la gente está más preocupada por la seguridad y la estructura jurídica”. En este sentido, consideró que si antes se buscaba el producto maravilloso, ahora priman mucho más los dos conceptos mencionados dadas las circunstancias actuales del sector. «El susto que los clientes de Chipre se han llevado dan aún más importancia al concepto de seguridad jurídica».
En cuanto a Asia, Serra puntualizó que “cuando tomemos la decisión de ir será para ganar dinero. En aquel continente, hay pocos bancos que ganan dinero, y haciendo banca privada casi ninguno. Para funcionar en Asia hay que hacer mucho apalancamiento. Es una zona de apalancamiento y producto”, y de mucho riesgo, recalcó.
Mora ha abierto una oficina en Dubai dirigida a los expatriados que trabajan en esa zona, más que para la gente local. Desde Suiza sí trabajan con clientes asiáticos en asset management y buscan captar parte de este mercado con éxito.
“El discurso de la banca privada ha cambiado”
En cuanto a la situación que atraviesa la banca privada, Serra sostuvo que desde la crisis de 2008, tras la quiebra de Lehman Brothers y el caso Madoff, “el discurso ha cambiado”. En aquella época “la custodia había desaparecido de las preocupaciones y hoy la custodia se ha vuelto más importante”. El cliente se da cuenta de lo que vale el dinero y el concepto de seguridad se ha vuelto más razonable. “Los clientes se han vuelto más inteligentes, más informados” y no hay que olvidar que “un cliente tiene memoria”.
Desde MoraBanc cuentan con dos perfiles de clientes muy diferentes: el ahorrador pequeño español de banca privada y clientes de patrimonios importantes. En el primero hay un nuevo segmento y es el profesional que trabaja fuera de España y que se hace residente en Andorra por las claras ventajas que la plaza aporta, en donde no se tributa. Andorra cuenta con 70.000 habitantes de los que sólo unos 30.000 son andorranos.
Respecto al desarrollo del negocio local, que cuenta con 30.000 millones de dólares bajo gestión, Serra manifestó que se han producido muchas entradas de dinero declarado por parte de ciudadanos españoles “a los que les daba miedo el sistema bancario español” dada la crisis que atraviesa el país vecino. En este sentido, matizó que esas entradas de dinero se han visto compensadas por las necesidades de los ahorristas españoles y la amnistía fiscal en España. “Las entradas casi han compensado las salidas que hemos tenido”, concluyó.