Mirova, la filial de Natixis Investment Managers dedicada a las finanzas sostenibles, ha anunciado el lanzamiento del proyecto Mirova Sustainable Land Fund 2, basándose en la experiencia pionera del Fondo LDN. Se trata de su segunda estrategia dedicada a la gestión sostenible de la tierra, que aspira a recaudar 350 millones de euros de organismos públicos e inversores institucionales. Según indican, con este lanzamiento la gestora sigue acelerando el crecimiento de su plataforma de capital natural.
El fondo tendrá como objetivo apoyar la transición y la descarbonización de las cadenas de valor agrícolas y forestales, con vistas a generar ganancias financieras e impacto positivo en términos de adaptación y mitigación del cambio climático, preservación de la biodiversidad e inclusión social, en particular para las mujeres en los países emergentes. El fondo apoyará la agrosilvicultura, la silvicultura sostenible y la agricultura regenerativa en los países en desarrollo, al tiempo que se preservan y restauran tanto la naturaleza como el clima.
La segunda generación del fondo MSLF2 se estructurará como un vehículo de financiación mixta, combinando capital público y privado: el compromiso de los fondos públicos tiene como objetivo reducir el riesgo y fomentar la inversión de los inversores privados para movilizar más capital para la gestión sostenible de la tierra y la preservación del capital natural. MSLF2 funcionará de la misma manera que LDN –principalmente mediante la financiación de deuda–, aprovechando al mismo tiempo la sólida experiencia técnica de su equipo de casi 20 personas y sus relaciones privilegiadas con actores del ámbito de la protección y restauración de la naturaleza.
“Aprovechando el éxito del fondo LDN, que está llegando al final de su despliegue, nos enorgullece anunciar los planes para lanzar nuestro fondo de segunda generación dedicado a la gestión sostenible de la tierra. MSLF2 se ofrecerá a organismos públicos e inversores institucionales deseosos de combinar el rendimiento financiero a largo plazo con la transición de las cadenas de valor agrícola y forestal. Encaja perfectamente con el objetivo estratégico de Mirova de aumentar sus inversiones en activos privados, y en particular en capital natural, a través de nuestra plataforma especializada”, ha señalado Anne-Laurence Roucher, directora general adjunta de Mirova, responsable de Capital Privado y Capital Natural.
En este sentido, Gautier Quéru, responsable de Capital Natural, ha añadido: “En un marco normativo internacional que está alentando a las empresas y a los inversores a tener más en cuenta su impacto sobre el clima y la naturaleza, este nuevo fondo dedicado a la restauración y protección de los ecosistemas terrestres debería permitir a los inversores adoptar la ya fuerte tendencia dirigida a transformar las cadenas de valor más dependientes de la naturaleza, al tiempo que se apunta a una rentabilidad financiera aprovechando la experiencia demostrada de Mirova en este ámbito”.
Despliegue del fondo LDN
Por otra parte, la gestora ha anunciado el despliegue final del fondo Land Degradation Neutrality (LDN). Según explica la gestora, el despliegue del fondo Land Degradation Neutrality (LDN) a través de estas tres últimas inversiones. Promovido junto con la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD), el LDN Fund dedicado a la restauración de tierras degradadas, creado en 2017 como un vehículo de financiación mixta, ha recaudado 208 millones de dólares de destacadas instituciones públicas e inversores privados. Estas nuevas inversiones elevan la cartera del LDN Fund a un total de 13 proyectos de gestión sostenible de la tierra en América Latina, África y Asia, en cadenas de suministro tan diversas como el café, el cacao, la madera, los frutos secos, la fruta fresca, los ingredientes para la industria farmacéutica y pagos por servicios para el ecosistema.