“La desigualdad racial es un problema que debería haberse resuelto hace mucho tiempo y es hora de que nos unamos y hagamos algo al respecto”. Esta es una de las frases con las que Mike Roberge, consejero delegado de MFS, ha mostrado su preocupación e indignación respecto a las tensiones raciales que se han vivido en Estados Unidos estas últimas semanas.
Roberge, que al igual que George Floyd es natural de Minneápolis, ha querido trasladar en una carta a sus empleados la inquietud que estos hechos le han causado, así como una clara denuncia sobre lo ocurrido. “Este odio y racismo ha estado ocurriendo durante décadas décadas. La gente negra está sufriendo de maneras inimaginables. Y es un dolor con muchas caras, ya sea para nuestra comunidad negra en MFS o para todos los demás que los apoyan. Para empeorar las cosas, la crisis de COVID-19 ha agudizado el aguijón de la desigualdad racial. La gente de color está contrayendo y muriendo desproporcionadamente por el virus, y en un país tan diverso y rico como los EE.UU., el acceso desigual a la atención médica de calidad es simplemente inaceptable”, denuncia Roberge en su carta.
El CEO de la firma ha destacado el papel que puede tener la comunidad de MFS para defender la inclusión y ser un ejemplo de cultura empresarial del respeto mutuo. “Para construir verdaderamente la igualdad y derribar el odio y el racismo, tenemos que hacerlo ladrillo por ladrillo, y no detenernos hasta que la barrera desaparezca. Todos y cada uno de nosotros en MFS tenemos que asumir la responsabilidad de hacer que eso suceda”, ha añadido e invitado a que cada uno se implique en resolver “las cosas que están a nuestro alcance”.
Por parte de MFS, Roberge ha explicado que la compañía está ampliando la formación de su equipo de liderazgo, gestores y empleados sobre aspectos como los prejuicios implícitos y el acoso. Según señala en su carta, la gestora tienen la intención de ampliar sus esfuerzos en términos de diversidad e inclusión por ejemplo realizando conferencias educativas, programas de formación e incluyendo a grupos de minorías en sus procesos de reclutamiento de personal.
Además de destacar su compromiso como compañía, también ha puesto el acento en su responsabilidad como inversores. “Otra forma de implicarnos es a través de las compañías en las que invertimos, donde usamos el poder de nuestro voto para impulsar la diversidad y la inclusión, porque creemos que es esencial para ser un buen empleador y a ser sostenible”, explica en la carta.
Por último, ha señalado que la tercera pata de su compromiso social es apoyar el trabajo “de los que están en primer línea de fuego tratando de eliminar la discriminación racial. “Como empresa, MFS apoyará los esfuerzos contra el racismo en la NAACP y la Iniciativa de Justicia Equitativa. También seguimos invirtiendo en comunidades poco representadas y apoyamos a varias organizaciones que promueven el acceso a la educación y a oportunidades económicas para comunidades desatendidas”, apunta en su carta.