María Vázquez, directora general de Gestión Fondo Educativo, asesor financiero independiente que realiza gestión «endowment» en España, tanto vía mandatos de inversión como a través de su fondo UCITS Auriga Investors-GFE Aequitas, explica en esta entrevista con Funds Society las claves para dar un buen servicio de inversión a las fundaciones en España.
¿Cuáles son los principales retos de las fundaciones a la hora de gestionar sus activos actualmente?
Hoy las fundaciones necesitan enfrentarse principalmente a dos retos: primero, que la gestión de sus patrimonios afectos genere rentabilidad y aporte recursos estables para poder financiar proyectos de forma sostenible, y segundo, mantener el valor del patrimonio de forma intergeneracional, incluso acrecentarlo, compensando el efecto erosionador que tiene la inflación. El modelo de gestión que siguen los endowment funds permite alcanzar los retos anteriormente mencionados. Es un modelo de gestión único, que ha hecho millonarias a las grandes universidades americanas.
La rentabilidad conseguida por un endowment fund, año a año, se destina tanto a financiar proyectos como a acrecentar el patrimonio para seguir generando beneficios a largo plazo. Pretenden ser fuentes de recursos económicos estables e intergeneracionales; en suma, un círculo virtuoso que permite atender tanto el hoy como el mañana. Gestión Fondo Educativo es el primer y único asesor financiero independiente que realiza gestión endowment en España, tanto vía mandatos de inversión como a través de su fondo UCITS Auriga Investors-GFE Aequitas, ofreciendo un servicio estratégico y a la medida de las necesidades de cada inversor.
¿Cómo están cambiando las necesidades de las fundaciones y qué aspectos priman en la gestión?
Las fundaciones tienen que trabajar activamente en el concepto “endowment” y mejorar la forma de invertir su patrimonio para asegurarse que mantienen en todo momento una cartera suficientemente diversificada e invertida en proyectos con valor a medio y largo plazo que les permitirán mantener liquidez y valor a futuro. La filosofía endowment es dinámica y busca invertir en proyectos sólidos a largo plazo que generen valor, sin por ello dejar de buscar rentabilidad y estabilidad en el corto plazo, sobre todo vía cupones y dividendos, e incorporando estrategias de cobertura para los riesgos de cola.
El modelo de trabajo de Gestión Fondo Educativo, dentro de la filosofía Endowment, busca valor en todo el mundo, es decir mantenemos una estrategia de inversión global (tanto en activos, países y divisas a la hora de elegir la inversión) que parte del siguiente enfoque:
- Combinación de objetivos a largo plazo con una gestión dinámica. Búsqueda continua de estrategias nuevas e innovadoras para preparar la cartera para el futuro.
- Gestión activa para dar una atractiva rentabilidad en todos los ciclos económicos con un reparto adecuado de los riesgos.
- Selección y gestión de las inversiones buscando siempre proteger el capital a largo plazo.
- Vocación inversora global, seleccionando con la máxima flexibilidad tanto clases de activos como valores y gestores.
- Anticipación de las grandes tendencias en los mercados con una planificación constante de los posibles escenarios futuros.
¿Qué aspectos hay que tener en cuenta en el caso de fundaciones con sesgo educativo o universidades? ¿Qué tipo de activos y estrategias resultan más atractivas y por qué?
Las fundaciones con sesgo educativo que quieren seguir el modelo de las grandes universidades americanas tienen que apostar por la educación y principalmente invertir en investigación para mantener un nivel de excelencia. Esto requiere plantearse un programa estratégico donde, además de contratar y estimular a los investigadores o consolidar y crear nuevos programas de postgrado, hay que contemplar el fortalecimiento de toda la infraestructura necesaria. Es indudable que de optar por este modelo, un endowment fund es necesario. A través del endowment fund se pueden financiar, con estabilidad e independencia, el compromiso con la investigación de la Universidad y dotarla de continuidad, permitiéndole incluso abordar proyectos de expansión y diversificación en su actividad, autofinanciando la innovación necesaria para seguir contribuyendo en el ritmo puntero de la sociedad que sirven.
La estrategia de gestión tiene que buscar a largo plazo retornos superiores a la media del mercado con una filosofía de inversión coherente y flexible, capaz de aprovechar las ineficiencias de los mercados. Este es el caso de las grandes universidades americanas, como por ejemplo la Universidad de Harvard, que con un endowment fund de 37.600 millones de dólares, financia una tercera parte de su presupuesto anual y ha conseguido una rentabilidad acumulada muy superior a la que ha conseguido el índice S&P500 con dividendos.
GFED, con este modelo de gestión, ha conseguido a lo largo de estos años unos retornos muy superiores a la media del mercado y claramente en línea con los obtenidos por los grandes endowments -una vez corregido el nivel de riesgo-, como demuestra la siguiente tabla:
¿Son para las fundaciones los activos alternativos una alternativa a considerar?
La mayoría de los inversores cuando piensan en su cartera lo hacen en dos dimensiones: bonos y renta variable. Los endowments incluyen una tercera dimensión: los activos alternativos. Volviendo al ejemplo de Harvard, en 1995 tenía un 25% de su endowment invertido en activos alternativos y en el año 2014 los activos alternativos pesaban un 57%.
Más que una alternativa son una necesidad. Los activos alternativos permiten mejorar el binomio rentabilidad/riesgo sobre una cartera que no los tiene. Esto se debe a que, normalmente, el comportamiento de la rentabilidad de los activos tradicionales y los alternativos es complementaria y además, normalmente son capaces de generar unos niveles de rentabilidad mayores.
¿Son estos modelos exportables a América Latina, conoce ejemplos?
El modelo es perfectamente exportable a cualquier zona del mundo, puesto que la filosofía de gestión es global. En España nosotros hemos corregido el nivel de riesgo para adaptarnos a un entorno más conservador. En América Latina habría que adecuar este servicio estratégico a la medida de las necesidades de cada inversor.
No conozco experiencias específicas. No obstante, en América Latina, bajo el Encuentro Iberoamericano de la Sociedad Civil, que se realiza desde 1992 bajo la organización de AEF y, precisamente está previsto que se celebre el próximo mes de noviembre en Venezuela, se reúnen fundaciones de los distintos países de la región con el objetivo de abordar los grandes retos del sector y preservar y hacer crecer el patrimonio de las fundaciones les puede permitir mayores logros en torno a su objetivo.