“Tienes que vivir sabiendo que la bolsa va a caer y si quieres invertir, esto es algo que tienes que interiorizar”, con estas palabras se ha referido Iván Martín Aránguez, socio fundador y director de Inversiones de Magallanes Value Investors, a lo relevante que es la visión a largo plazo a la hora de invertir, durante el marco de su III Conferencia Anual celebrada hoy.
La gestora especializada en value celebra sus tres años y para ello ha defendido su visión value como “la compra de compañías que están por debajo de su valor”, lo que según Aránguez les diferencia de la especulación. “Buscamos compañías y valores que están baratas y lo enfocamos no como un fondo de compañías, sino como la oportunidad de ser dueños de esas compañías”, ha matizado.
Antes de presentar la evolución de sus fondos, Blanca Hernández, socia fundadora y consejera delegada de Magallanes Value Investor, ha destacado que “en Magallanes creemos que no basta con tener inteligencia y sentido común, un buen proceso de inversión con capacidad de valoración y convicción. La diferencia de rentabilidades a menudo está en la capacidad de controlar los sentimientos y las emociones, sabiendo que en las decisiones de inversión con frecuencia nosotros somos nuestro peor enemigo”.
En línea con los principios que Hernández ha recordado que rigen la gestora –visión a largo plazo, rendimientos y responsabilidad con el inversor–, ha anunciado que próximamente lanzará el fondo Magallanes Impacto FIL, en el que han estado dos años trabajando y está pendiente de la aprobación por parte de la CNMV.
“Estamos muy ilusionados porque combinará rentabilidad económica y rentabilidad social. Es un fondo libre que invertirá en entidades microfinancieras que conceden microcréditos, principalmente a mujeres, en países en vía de desarrollo. Será un fondo sin ánimo de lucro para Magallanes rentable para el inversor y con un impacto en miles de mujeres en situación de pobreza, donde devolveremos la comisión si no hay impacto social. Será asesorado por Gawa Capital, empresa líder en este tipo de activos, los microcréditos. Una clase de activos que nos encanta porque no está correlacionada con los mercados, aporta diversificación y como decíamos tiene un impacto social sostenible y medible”, ha explicado Hernández.
Resultados tras tres años
Sobre sus tres estrategias –Magallanes Iberian Equity, Magallanes European Equity y Magallanes Microcaps Europe–, Aránguez ha señalado que, ya pasado los tres primeros años, comienza a verse las rentabilidades de esa apuesta a largo plazo. En el caso del fondo Magallanes Iberian Equity ha destacado la baja rotación de la cartera y las interesantes oportunidades que están encontrando en Portugal.
“Hemos logrado una rentabilidad anual compuesta del 13%, una rentabilidades de doble dígito en tres años, que es a lo que aspiramos en el medio largo plazo; por lo tanto está bastante bien. Comparado con otros competidores, la diferencia es más notable si tenemos en cuenta lo plano que ha sido el mercado ibérico”, ha puntualizado.
En el caso de Magallanes European Equity, ha matizado que el nivel de rotación es algo mayor y la fuerte presencia que hay de empresas de pequeña y mediana capitalización, lo cual, ha aclarado Aránguez, ha sido algo casual ya que “hace tres años, cuando invertimos en estas empresas aún eran algo más pequeñas”.
Por último, durante la conferencia, tanto Aránguez como Hernández han hecho referencia a Magallanes Microcaps Europe, fondo que cerraron a finales de la semana pasada tras alcanzar los 100 millones de euros. El cierre del fondo implica que a partir de los 100 millones de euros, cada nuevo partícipe sólo podrá mantener una participación, salvo en el caso excepcional de que se produzcan reembolsos que supongan una disminución del 10% del patrimonio en un plazo igual o inferior a 10 días.
“En Magallanes prima la rentabilidad del inversor sobre el tamaño de la gestora. No es un tema de marketing, nacimos con ese compromiso porque el tamaño sí importa y sabemos que puede perjudicar las rentabilidades futuras. Durante estos 3 años hemos llegado prácticamente a nuestra capacidad. Anunciamos reciénteme el cierre del Microcaps tras sólo un año de vida. Al ibérico le queda muy poco, lo cerraremos en 500 millones y el europeo, aunque tiene más capacidad, unos 2.500 millones, se está acercando por el interés de inversores extranjeros”, ha explicado Hernández.