El sector bancario ha sido uno de los ámbitos profesionales con más contrataciones en las últimas décadas, pero desde la crisis financiera de 2008 ha habido muchos cambios que siguen acelerándose con la crisis del COVID-19. Ahora, los perfiles más buscados ya no son directores de oficina, sino analistas o directores de reestructuración, gestores de patrimonio o especialistas en recobros.
Ramon López, consultor senior de banca en HAYS España, explica que, debido a las consecuencias económicas de la crisis provocada por el COVID-19, se prevé un alza en la contratación de analistas de riesgos, expertos en recobros y analistas de reestructuración. Pese a que los salarios de estos perfiles no son de los más altos del sector, comparados con otros profesionales como los de banca de inversión, tendrán una alta demanda en los próximos meses y podrían ver aumentada su retribución media en el próximo año.
Una de las tendencias que continúa estando vigente es la de la banca privada, que en los últimos años ha conseguido un volumen de contratación muy alto. “Desde la crisis de 2008 hay muchos clientes que prefieren una atención más personalizada y que apuestan por sociedades gestoras independientes frente a la banca privada tradicional, lo que ha implicado que los gestores de patrimonio y asesoramiento financiero sean cada vez más demandados, y que estos estén optando por desarrollar sus carreras fuera de los grandes bancos”, señala.
De las fusiones a las Fintech
Ramon López asegura que a pesar de las fusiones en banca comercial, que han provocado una reducción de personal, se sigue contratando intensamente en otras áreas. A los profesionales con base tecnológica, ya demandados desde hace años, se les une la alta contratación que están haciendo las Fintech. “Hay muchas startups del sector que cuentan con grandes fondos de inversión y que tras realizar una ronda de financiación fuerte apuestan a lo grande y fichan en la banca tradicional”, apunta.
“En los próximos meses va haber mucho más trasvase de perfiles hacia las Fintech, se trata de un momento dulce para ellas porque pueden fichar profesionales muy cualificados de multinacionales que están haciendo ajustes de personal”, destaca. Además, “es importante que tengan una base tecnológica pero que estén orientados a cliente”.