La inversión con criterios ASG (ambientales, sociales y de gobierno corporativo) gana peso entre los gestores institucionales. Así se desprende del informe Grandes Expectativas: ASG – ¿Qué depara el futuro para las compañías de seguros, planes de pensiones y gestoras?, elaborado por BNP Paribas Securities Services. Entre sus conclusiones indica que el 79% de los encuestados –gestores de activos, las compañías de seguros y planes de pensiones– incorporan criterios ASG, ya sea en su manera de invertir o en términos de los productos que comercializan.
Del 77% de las compañías de seguros y planes de pensiones que incorporan estos criterios, la encuesta pone de manifiesto que actualmente cerca de la mitad invierten un 25% o menos de su cartera en estrategias específicas basadas en criterios ASG, y tienen previsto aumentarlo al 50% o más en los próximos dos años. Del mismo modo, del 80% de gestores de activos que incorporan factores ASG, el 40% comercializa actualmente un 25% o menos de sus fondos como vinculados a criterios ASG o de inversión socialmente responsable (ISR). Sin embargo, esta cifra se estima que se incrementará considerablemente en los próximos dos años, con más de la mitad de los gestores de activos, el 54%, comercializando un 50% o más de sus fondos como productos ASG.
Según señala Soledad Lecube, directora general de BNP Paribas Securities Services en España, “está previsto que en los próximos dos años se produzca un cambio importante en la manera de seleccionar las inversiones. En la actualidad está ampliamente aceptado incorporar criterios ASG ya que puede ser beneficioso para la rentabilidad. No obstante, a partir de ahora veremos que las empresas realmente trasladan esta percepción a la práctica otorgando mayor peso a estas inversiones”.
Sin embargo, avisa de que existen algunos retos de cara a una mayor implantación de los criterios ASG. “Para obtener y analizar los datos ASG, tanto los gestores de activos, como las compañías de seguros y planes de pensiones necesitarán nuevas herramientas, recursos y competencias, y por eso creemos que la tecnología desempeñará un papel fundamental a la hora de ayudarles a cumplir sus objetivos”, apunta.
La carencia de capacidades
La encuesta reveló que al 64% de las compañías de seguros y planes de pensiones y al 47% de los gestores de activos les preocupa que la falta de datos sólidos pueda actuar en estos momentos como barrera para una mayor adopción de criterios ASG, aunque estas cifras bajan al 22% y el 8% respectivamente dentro de dos años. La falta de análisis avanzados también es una preocupación importante para ambos grupos de encuestados, ya que casi una cuarta parte, el 23%, lo cita como una futura barrera y plantea la necesidad de invertir en tecnología y especialistas.
En este sentido, Borja Rodríguez Cano, responsable de Desarrollo de Negocio de BNP Paribas Securities Services en España, afirma que “una vez superado el reto de los datos, la capacidad de sacar conclusiones de los mismos seguirá siendo un problema y es aquí donde entrará el uso inteligente de los datos, la inteligencia artificial y los expertos en ASG. Esperamos que todos los inversores refuercen sus competencias técnicas y personales con el fin de hacer frente a estas necesidades en los próximos años”.
Preocupación de los gestores de activos por los costes y productos
El desarrollo de nuevos recursos requerirá más inversión, lo que incrementa la preocupación de inversores por el posible aumento de costes. La encuesta reveló que el 31% cree que ahí radicará el principal reto en los próximos dos años. Este también será el obstáculo futuro más importante según los encuestados; de hecho al 28% de los gestores de activos les preocupa que no estén capacitados para satisfacer las necesidades de productos basados en criterios ASG demandados por las compañías de seguros y planes de pensiones. El mismo porcentaje prevé que será un motivo de preocupación en el plazo de dos años.
En opinión de Lecube esto supone que “los gestores de activos tendrán que trabajar estrechamente con las compañías de seguros y planes de pensiones para entender sus necesidades en materia de factores ASG y diseñar productos adaptados a ellos lo que consecuentemente exigirá inversiones”.
Activos alternativos
El estudio también avanza un cambio en la asignación de inversiones en materia de ASG en los próximos dos años hacia los activos alternativos. Los gestores de activos, las compañías de seguros y los planes de pensiones esperan incrementar en dos años un 20% su inversión en activos alternativos con vocación de desarrollo de criterios ASG, incluidos fondos de cobertura, infraestructura, inmobiliarios, capital riesgo y deuda.
En cambio, se prevé una reducción del peso de la inversión en activos tradicionales hasta un 26%, que actualmente representa casi la mitad de la composición de las inversiones en factores ASG. “Quizá, contrariamente a la impresión generalizada, las clases de activos alternativos cada vez incluyen más ‘conciencia ASG’. Las firmas de capital riesgo, por ejemplo, quieren asegurarse de que podrán finalizar una inversión de forma rápida y eficaz y por eso están incorporando estos factores al estructurar sus inversiones”, señala Rodríguez.
En su opinión han surgido algunos problemas por la falta de uniformidad en el espacio alternativo. Sin embargo, iniciativas recientes como Global Real Estate Sustainability Benchmark, el índice mundial de sostenibilidad inmobiliaria, están empezando a surtir efecto y “a aportar esa transparencia tan necesaria para los inversores”, añade.