Los inversores europeos siguieron en noviembre un patrón de comportamiento muy similar al de los últimos meses: el apetito por las bolsas es más que evidente, a vez que los activos emergentes siguen generando rechazo, al igual que sucedió en septiembre y en octubre. Los fondos de renta variable alcanzaron entradas netas de 8.400 millones de euros en el mes de noviembre y, sobre todo gracias a ellas, los fondos europeos con vocación de largo plazo (todos excepto los monetarios) registraron suscripciones de 13.900 millones, según los datos de Morningstar.
“A medida que la racha alcista continuó en la bolsa, los fondos de las categorías de renta variable europea de gran capitalización, renta variable japonesa y renta variable global de alto dividendo permanecieron en la lista de la compra de los inversores”, explica Javier Sáenz de Cenzano, director de Análisis de Fondos de Morningstar en España.
También los productos de renta fija de alta rentabilidad se benefician de esta búsqueda de rendimiento que se observa desde hace meses, y los fondos mixtos, en los que entraron más de 6.400 millones de euros, un dato positivo por vigésimo tercer mes consecutivo. Cabe destacar que los fondos de renta fija corporativa americana pusieron fin a cinco meses consecutivos de salidas y captaron 1.300 millones en noviembre.
En un entorno en el que las correlaciones entre los activos vuelven a aumentar, los fondos de gestión alternativa se postulan como una solución para añadir diversificación a las carteras, y también para reducir la volatilidad. En noviembre, los fondos de este tipo registraron entradas netas de 1.700 millones de euros, mientras que los fondos monetarios sufrieron salidas de 8.200 millones.
Gracias a sus apuestas acertadas, UBS Global AM lideró las entradas en noviembre, captando 1.200 millones, seguida por J.P. Morgan AM, con 1.100 millones.
Huida de renta fija emergente
Al otro lado, los datos muestran que los inversores huyeron de los fondos de renta fija emergente, que vieron reembolsos de 3.100 millones de euros en noviembre. En total, los fondos de renta fija sufrieron salidas de 2.100 millones.
“Como resultado de la subida de tipos de interés a nivel mundial y la persistente preocupación por la reducción del programa de compra de activos de la Reserva Federal, los inversores europeos huyen de los fondos de renta fija. Salieron de los fondos de renta fija emergente y también se vieron afectados los fondos de renta variable emergente”, explica Sáenz de Cenzano.